La red Riseup4Rojava ha emitido una declaración en la que condena los ataques turcos contra el Norte y el Este de Siria y pide una acción organizada en las calles para protestar por estos hechos.

La declaración dice: "El 23 de diciembre, el Estado turco lanzó una brutal campaña de bombardeos contra infraestructuras civiles en Rojava (norte de Siria). Con la zona todavía luchando por recuperarse de los ataques que sufrió a principios de octubre, esta nueva serie de incursiones impide cualquier estabilización en la región.

En octubre, un primer ataque turco tuvo como objetivo las infraestructuras vitales de Rojava (gas, electricidad, agua, lugares de producción de bienes de primera necesidad, etc.), causando daños masivos y poniendo en peligro los medios de subsistencia de millones de personas.

Las nuevas incursiones aéreas que acaba de lanzar el Estado turco tienen como objetivo las mismas infraestructuras vitales y también lugares de trabajo y de producción. Sean cuales sean las consecuencias de estos ataques (que siguen en curso), ya es seguro que nos enfrentamos a una catástrofe en Rojava, con el invierno acercándose y la producción eléctrica y de combustible gravemente dañada."

La declaración continúa: "En las montañas del Kurdistán Sur (“Bashur” en kurdo, en el norte de Irak), las guerrillas han lanzado una serie de acciones victoriosas contra las fuerzas de ocupación turcas, que están lejos de conseguir debilitar la resistencia a la ocupación a pesar del uso de armas prohibidas por todas las convenciones internacionales. Tras haber sufrido numerosas bajas, el Estado fascista turco dirige ahora su furia contra el pueblo de Rojava. La población civil y sus medios de subsistencia están en el punto de mira para castigar al pueblo y debilitar el vínculo entre éste y sus fuerzas de autodefensa.

Mientras que la región es atacada regularmente por aviones no tripulados dirigidos contra representantes de las estructuras de autonomía, las fuerzas de autodefensa y la población civil, esta nueva ofensiva pretende disociar a la población de las estructuras del confederalismo democrático infundiendo miedo en la sociedad. Pero estos ataques se dirigen contra un proyecto político presentado por los propios pueblos de la región. Una sociedad sin Estado, democrática, ecológica, multiétnica y multicultural, impulsada por la vanguardia de las mujeres. La política genocida de Turquía tiene como objetivo el desplazamiento del pueblo, y más esencialmente una limpieza étnica".

La declaración añade: "Ante esta situación, hacemos un llamamiento a todas las fuerzas revolucionarias, antifascistas, democráticas y amantes de la libertad de todo el mundo para que se organicen y presionen a Turquía dondequiera que esté. No olvidemos que el Estado turco libra a menudo su guerra sucia con apoyo político y con armas y tecnologías occidentales. Desde la difusión de información hasta las protestas frente a las embajadas turcas, pasando por otras formas de acción directa y desobediencia civil, existen innumerables medios.

Lo que necesitamos ahora es una respuesta rápida para detener los ataques de inmediato".

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