En marzo, la 46ª sesión del Consejo de Derechos Humanos tratará el tema del asesinato masivo de tamiles por parte del ejército de Sri Lanka en 2008-2009. Según la ONU, 70.000 personas fueron asesinadas por el ejército de Sri Lanka durante la operación de exterminio contra el movimiento por la libertad tamil LTTE y la población que vivía en las zonas liberadas. En la actualidad, 146.000 personas siguen "desaparecidas". La diáspora tamil exige que la ONU investigue los crímenes de guerra a través de estructuras independientes del gobierno de Sri Lanka.
Las organizaciones tamiles han iniciado una campaña de recogida de firmas para presionar al gobierno alemán para que se presente en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Las firmas recogidas en el marco de la campaña se entregarán al Ministerio de Asuntos Exteriores en Berlín en una concentración que tendrá lugar hoy a las 12 horas.
"Las reivindicaciones de los tamiles son también las del pueblo kurdo"
El Consejo del Pueblo Kurdo en Berlín ha anunciado su apoyo a la concentración de hoy. Ismail Parmaksiz, co-presidente del consejo, llamó a participar en la protesta. El destino de los tamiles es similar al de los kurdos, y la demanda de investigar los crímenes de guerra también es la suya, subrayó Parmaksız añadiendo: "Las organizaciones tamiles han participado a menudo en nuestras manifestaciones y protestas. Siempre estuvieron a nuestro lado en nuestra lucha. Por eso también llamamos a la población kurda de Berlín a participar en la manifestación de protesta organizada por la diáspora tamil. La demanda del pueblo tamil es también la nuestra".
La lucha kurda y tamil por la libertad: una conexión histórica
A pesar de la gran distancia física, siempre hubo una cercanía entre las luchas tamiles y kurdas por la libertad. Ya a principios de la década de 1990, el PKK calificó al LTTE tamil de socio estratégico. En el exilio, en particular, hubo repetidas sinergias. Pero los regímenes opresores también muestran paralelismos y describen las consecuencias más oscuras del Estado-nación. Mientras que Turquía está gobernada por un monismo suní-pan-turquista de características racistas, Sri Lanka está dominada por un monismo budista-sinhala de características racistas. La población tamil se enfrenta a un régimen de asimilación y exterminio. El asesinato masivo del movimiento por la libertad de los tamiles y de la población de las zonas liberadas siriveron de hoja de ruta para el proyecto del "plan de exterminio" turco, que dio lugar a la destrucción de las ciudades kurdas en 2015/16 y la base para la invasión del Kurdistán del Sur y Rojava. Este paralelismo no es casual, porque el régimen turco se refiere positivamente al genocidio del ejército cingalés y habla de una "solución tamil" a la cuestión kurda, un eufemismo para el genocidio y el asesinato en masa. Por ello, no es una coincidencia que el presidente del Consejo Popular del Eelam Tamil en Alemania, Gopalapillai Jeyasangar, haya declarado: "Al igual que los regímenes opresores se apoyan mutuamente, los pueblos oprimidos también deben luchar juntos".