Hace 42 meses que no hay noticias del líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan. Personas de todo el mundo siguen manifestándose contra este estado absoluto de anarquía. 61 personalidades francesas, entre políticos, artistas, académicos y defensores de los derechos humanos, enviaron una carta al Comité Europeo para la Prevención de la Tortura (CPT) sobre este asunto. Una de las firmantes de la carta, la senadora francesa Anne Souyris, habló con ANF.

"Hay que poner fin inmediatamente al aislamiento de Imrali"

La senadora Anne Souyris declaró: «Firmamos esta carta para pedir al CPT que visite al Sr. Öcalan en la cárcel, compruebe su estado de salud y las condiciones de detención y se asegure de que se respetan sus derechos fundamentales. El objetivo era también presionar para garantizar que el Sr. Öcalan tiene acceso a sus abogados».

La senadora Souyris añadió: «El aislamiento es definitivamente una forma de tortura y una situación que no encaja en la democracia. El aislamiento es una tortura tanto para el Sr. Öcalan como para su familia. El aislamiento en Imrali también crea una presión insoportable sobre los ciudadanos, porque cualquier ciudadano puede ser amenazado con una detención tan injusta e inaceptable. Estas condiciones son una situación que hay que contrarrestar. Debemos luchar contra este aislamiento porque tenemos la posibilidad de expresarnos de otra manera en Europa».

"Hay que luchar a nivel internacional"

La senadora Souyris continuó: «Las condiciones en las que se encuentra Abdullah Öcalan son realmente una señal importante para nosotros en términos de democracia. Veo que Turquía quiere convertirse en miembro de la Unión Europea. Podemos pensar en ello el día en que Turquía se democratice.

Los lugares de detención son lugares protegidos por la ley y la democracia, donde se respetan los derechos fundamentales. Pero no tenemos noticias del Sr. Öcalan, por lo que podemos ver que no se respetan sus derechos. No sabemos si goza de buena o mala salud, ni siquiera sabemos si está vivo, porque nadie puede saber nada de él. Ni siquiera su familia...

Es una situación inaceptable. Por eso es absolutamente esencial que averigüemos qué está pasando. Además, sé que hay otros tres presos con el Sr. Öcalan, y que están detenidos en condiciones similares. No debemos permitir que esto ocurra. Este aislamiento es algo que debemos vigilar y contra lo que debemos luchar a nivel internacional. Debemos presionar a Turquía para que ponga fin a esto y evitar que vuelva a ocurrir».

"Europa necesita coraje político"

 «Creo que estamos actuando con demasiada lentitud tanto para cambiar la situación del Sr. Öcalan como para detener la guerra emprendida contra el pueblo kurdo. Hay preocupaciones e intereses geopolíticos que empujan a las instituciones europeas al silencio. Sin embargo, en los últimos años, hemos tenido algunos ministros que han apoyado los derechos de los kurdos, especialmente los del Kurdistán Norte. Por lo tanto, aunque recibamos el apoyo oficial de ministros franceses, así como de otros ministros europeos, no podemos permanecer en silencio ante lo que está ocurriendo. Del mismo modo, no podemos deportar a los kurdos amenazados por el Estado turco, sabiendo que en Turquía no se respetan sus derechos. Esto es a lo que nos enfrentamos en Europa. No se pueden apoyar los derechos y callar al mismo tiempo cuando se violan. Creo que Europa necesita coraje político. Es el deber de Europa y de Francia».

"Se pueden imponer sanciones a Turquía"

Souyris prosiguió: «Está claro que el Sr. Erdoğan mantiene buenas relaciones con Francia y Europa, por lo que nadie quiere recurrir a acciones militares, presiones o sanciones económicas. Sin embargo, se pueden aplicar sanciones económicas sin recurrir a la acción militar. Sin embargo, nadie se atreve a hacerlo por el momento. Lo que quiero decir es que tenemos las herramientas para hacerlo. El Sr. Erdoğan necesita a Europa, necesita nuestro apoyo, y podemos condicionar este apoyo. Europa tiene las herramientas para presionar. Por lo tanto, debemos hacerlo».

Souyris afirmó que «en las últimas elecciones, el señor Erdoğan intentó nombrar síndicos en lugar de alcaldes kurdos elegidos democráticamente, lo que supone un verdadero problema para la democracia. Por lo tanto, tenemos un régimen que parece democrático pero que en realidad tiene fuertes indicios de autocracia. Tenemos que deshacernos de este régimen, tanto por su estructura institucional como por su falta de respeto a los derechos de las minorías. Esto está muy claro».

"El diálogo político y la negociación son imprescindibles"

El senador francés prosiguió: «El Sr. Öcalan cree que puede dirigir un diálogo con Turquía sobre una solución a la cuestión kurda. Creo que el diálogo debe tener lugar. Es inaceptable que los derechos de la población kurda en Turquía sigan siendo negados como hasta ahora. No hay diálogo para la solución de la cuestión y esto es inaceptable. En algún momento, el derecho internacional y el derecho de los pueblos a la autodeterminación deberían ser reconocidos en todos los países. Por desgracia, no es el caso de Turquía.

Lo importante es llegar a un diálogo. Ya sea bajo el nombre del PKK o de otro modo, lo más importante es sentarse a la mesa de negociaciones. Quizá Europa pueda desempeñar un papel facilitador en este diálogo en lugar de permanecer pasiva como hasta ahora. Europa también puede asegurarse de que el Comité para la Prevención de la Tortura visite al Sr. Öcalan, recomiende que se tomen ciertas medidas y confirme que se respetan sus derechos fundamentales y los de otros presos en régimen de aislamiento.

Este podría ser el comienzo de un nuevo diálogo con el Sr. Öcalan y otros militantes y ciudadanos kurdos. Europa protege los derechos fundamentales e incluso puede actuar como tercera parte. El Parlamento Europeo puede tomar decisiones para enviar delegaciones a reunirse con el Sr. Erdoğan y considerar la imposición de sanciones si nada cambia.»