Durante cinco días, Irán ha estado atacando áreas en el sur de Kurdistán (norte de Irak) con drones y misiles. La ola de agresiones está dirigida contra bases del Partido Democrático de Kurdistán-Irán (PDK-I), el Partido de la Libertad de Kurdistán (PAK), el Partido por una Vida Libre en Kurdistán (PJAK) y Komala en las provincias de Hewlêr (Erbil) y Sulaymaniyah. Según la información inicial del PDK-I, dos de sus miembros fueron asesinados en el distrito de Koyê, cerca de Hewlêr, y decenas más resultaron heridos. El bombardeo masivo provocó el pánico entre la población; las personas que huyen se pueden ver en los videos de las redes sociales.
Komala también informa de bajas por el bombardeo de una base en Zirgwêz cerca de Sulaymaniyah. También fue atacada una base de PAK en Pirde, al sur de Hewlêr, y la ciudad de Mawet en las estribaciones de las montañas Asos, donde PJAK opera campamentos base.
La agencia de noticias estatal iraní IRNA confirmó que las fuerzas de élite iraníes atacaron la sede de los partidos de oposición kurdos con sede en Irán en las provincias de Hewlêr y Sulaymaniyah. Según el Ministerio de Salud de la Región del Kurdistán de Irak (KRI), al menos siete personas han muerto y otras 24 han resultado heridas. Entre las víctimas hay civiles y miembros de los partidos de oposición atacados, incluidos niños.
Irán acusa a los partidos de oposición kurdos de estar involucrados en los levantamientos que estallaron tras la muerte de Jina Mahsa Amini. La mujer kurda de 22 años fue detenida en Teherán el 13 de septiembre por "vestimenta inapropiada" por la policía moral y murió poco después en el hospital como resultado de malos tratos masivos.