Mahmoud Xoshnaw, miembro de la Unión Patriótica del Kurdistán (PUK), informó a los medios iraquíes que el primer ministro saliente de la región del Kurdistán, Masrour Barzani, ha incorporado a 20.000 sirios a otras fuerzas afiliadas al KDP, incluido Zêrevan.

Mahmoud Xoshnaw declaró: “Estos nombramientos se hicieron con salarios altos, lo que causó malestar al gobierno de Bagdad. Cuando la Comisión Económica Iraquí visitó la región del Kurdistán, los funcionarios del gobierno hicieron cambios en la lista de empleados asalariados porque el gobierno central había dejado de pagarles los salarios a estas personas. El gobierno reemplazó los nombres de los sirios por los nombres de los ciudadanos iraquíes para que no se les suspendieran los salarios”.

En cuanto al malestar del gobierno de Bagdad, Mahmud Xoshnaw declaró: “La principal razón del malestar del gobierno iraquí fue la negativa del gobierno regional del Kurdistán a enviar la lista de nombres de sus fuerzas al gobierno central. Esta cuestión provocó una crisis política y financiera entre Bagdad y Hewlêr (Erbil). Las relaciones entre las dos partes han llegado a un punto de ruptura debido al reparto de los ingresos petroleros y fronterizos. Este caso puede llevar a un examen más profundo de las políticas laborales y de empleo en la región. También demuestra que hay que aumentar la presión sobre el gobierno de Masrour Barzani y hacer más transparentes las ambigüedades de estas listas”.