Según informes desde el terreno, las fuerzas del KDP, el partido gobernante en la región del Kurdistán de Irak, evacuaron las aldeas de Spîndarê, Mijê y Kevne Mijê en Amadiya siguiendo instrucciones del Estado turco ocupante.

Según la información proporcionada por fuentes locales, el KDP estableció puntos de control en las carreteras que conducen a las aldeas evacuadas para allanar el camino a los ataques de invasión del Estado turco y las aldeas fueron cerradas a la entrada y salida.

El Estado turco ocupante, las Asayish (fuerzas locales de orden público) y las fuerzas Peshmerga afiliadas al KDP han evacuado y despoblado por la fuerza casi 600 aldeas en el sur del Kurdistán hasta el momento.

El partido controlado por la familia Barzani depende en gran medida del régimen del AKP/MHP y está estrechamente aliado con él. El Estado turco está intentando utilizarlo como herramienta para desencadenar una guerra civil interna kurda. El reciente despliegue de tropas por parte del KDP muestra la magnitud del peligro. En los últimos años, ha preparado repetidamente emboscadas contra los guerrilleros, ha marcado objetivos para los ataques aéreos turcos, ha capturado guerrilleros e incluso los ha "desaparecido". El servicio de inteligencia del KDP, Parastin, apoya al servicio de inteligencia turco MIT en sus ataques contra activistas kurdos en el sur de Kurdistán. Hasta ahora, una escalada importante sólo pudo evitarse gracias a la actitud paciente de los guerrilleros, que intentan construir una unidad kurda. Sin embargo, como el ejército turco parece estar nuevamente a la defensiva en su actual ataque a gran escala contra las Zonas de Defensa de Medya controladas por la guerrilla, es cada vez más probable que se produzca un ataque de socorro por parte del KDP.

El 13 de septiembre de 2023, el partido de los Barzani envió cientos de vehículos blindados y armas pesadas a Bradost después de evacuar por la fuerza a los nómadas de la región mediante amenazas, represión y uso de la fuerza. Una parte de la fuerza del KDP atacó  al día siguiente las posiciones de la guerrilla en Gewriya Zînê, en la zona de Goşîne. 

En los últimos dos años, en particular, el Estado turco, con la ayuda del KDP, ha intentado conectar muchas áreas de las que la población civil ha sido desplazada y crear una zona de amortiguamiento a lo largo de la frontera del Kurdistán del Sur. Esta zona se extiende desde Behdînan hasta Bradost. Se han establecido numerosas bases a lo largo del frente Amêdîyê. Aunque aparentemente se trata de fuerzas del KDP, hay tropas turcas en estas bases. El ejército turco, que recientemente estableció una nueva base en la región de Bradost, está intentando incrementar aún más sus actividades en esta región. Ha establecido muchas bases nuevas en la región de Balekayetî. Las fuerzas del KDP han hecho todos los preparativos para ello. El Estado turco también ha establecido nuevas bases en la región de Mehmudiyê, en las fronteras de Rojava con Kurdistán del Sur, así como en las fronteras de Zaxo y Batûfa. El objetivo es ampliar esta zona de amortiguamiento y preparar un interior para una nueva operación de invasión contra Rojava. Quienes se oponen a la ocupación son atacados y asesinados basándose en la información de inteligencia proporcionada por las tropas del KDP. En la actualidad, se están haciendo intentos de rodear completamente las Zonas de Defensa de Medya en el Kurdistán del Sur y crear una zona de amortiguación militar con estas bases y las bases que ya se han construido antes.

Turquía lleva años atacando las Zonas de Defensa de Medya, en el sur de Kurdistán (norte de Irak). En abril de 2022 se lanzó una operación integral en las regiones guerrilleras de Zap, Metîna y Avaşîn. Como la invasión no logró el éxito deseado, el Estado turco intenta establecerse en la zona a través del KDP (Partido Democrático del Kurdistán), el partido gobernante dominado por el clan Barzani. Las fuerzas del KDP están estableciendo nuevas bases y construyendo carreteras militares para las tropas turcas. Para garantizar el libre acceso de Turquía, se está expulsando a los aldeanos de las zonas afectadas.

Según el periodista Baran Germiyanî, que vive en la región del Kurdistán iraquí y habló con la agencia de noticias Mezopotamya (MA) en noviembre, 158 aldeas ya han sido evacuadas y al menos 600 están amenazadas de desalojo porque el KDP está ejerciendo presión durante el actual conflicto con los ataques turcos. Germiyanî afirmó que Turquía no ha logrado los resultados deseados en la región y que el KDP está allanando el camino para Turquía con su política de despoblación.

En una entrevista en noviembre, Cemil Bayık, co-presidente del Consejo Ejecutivo de la KCK (Unión de Comunidades del Kurdistán), comentó sobre el papel del KDP en la campaña genocida del Estado turco contra el pueblo kurdo, afirmando lo siguiente: “Aquellos en el KDP que actualmente que dominan la región de Behdînan son del lado de la familia de Massoud Barzani. Trabajan sólo por sus propios intereses y los de sus familias, sirviendo así a las políticas genocidas del Estado turco. Esto está sucediendo ante los ojos de la opinión pública. Cualquiera que diga ser kurdo, patriótico, políticamente concienzudo y moral debe darse cuenta de esto. Ésta no es una política que cualquiera pueda aceptar. Servir a la política de los genocidas no beneficia al pueblo kurdo. Por lo tanto, los demócratas, los patriotas, las personas políticamente conscientes y morales necesitan ver quién está al servicio del pueblo kurdo y quién está al servicio de la política de genocidio. El patriotismo significa oponerse a la política del genocidio. El Estado turco está librando esta guerra con el apoyo del KDP. No sólo en las Zonas de Defensa de Medya, sino también en el Kurdistán del Norte y del Sur, así como en Rojava y en diferentes partes del mundo. La política del Estado turco contra el pueblo kurdo se lleva a cabo con el apoyo del KDP y especialmente de Masoud Barzani. Si no los apoyaran, el Estado turco no sería capaz de llevar a cabo esta política de genocidio contra el pueblo kurdo".