La Asociación de Derechos Humanos de Turquía (IHD) anunció el informe titulado "Informe de las regiones de Anatolia oriental y sudoriental sobre violaciones del derecho a la vida debido a colisiones de vehículos blindados entre 2008-2018".

El Capítulo de la IHD de Amed (Diyarbakır) hizo un anuncio sobre el informe y dijo: “La guerra en curso y el conflicto de baja intensidad de 35 años en la Anatolia oriental y sudoriental han causado un daño social grave y difícil de reparar. Según los registros no oficiales, más de 50.000 personas han perdido la vida en este conflicto. Se han producido graves violaciones de derechos humanos debido a la atmósfera violenta y han aumentado sistemáticamente".

El informe señaló que se han cometido violaciones de derechos en muchas categorías, una de ellas es la violación del derecho a la vida debido al uso de vehículos blindados militares y policiales.

El informe cita al menos 63 colisiones de vehículos blindados en la última década: "Como resultado de 63 casos, 36 personas, entre ellas 16 niños y 6 mujeres, perdieron la vida", detalló el IHD, y agregó que 85 ciudadanos resultaron heridos en estos incidente: "Otros se han visto obligados a continuar sus vidas con discapacidades físicas".

Según el informe, las muertes y lesiones han afectado de peor manera a los niños y adultos mayores, y se cuestionó la idoneidad de los vehículos blindados para el tráfico urbano.

La IHD también hizo hincapié en las políticas de impunidad con respecto a las violaciones de los derechos de los vehículos blindados: “Ha habido poca o ninguna sentencia, en las investigaciones y juicios contra los perpetradores en estos incidentes, y como tal, los procesos legales se han manifestado de impunidad. Esto alienta a los perpetradores de tales incidentes, y les da confianza en el sistema de que no enfrentarán repercusiones legales. Los incidentes se propagan de esta manera, y esto hace que los operadores de vehículos blindados adopten una actitud de irregularidad y arbitrariedad en el tráfico urbano".

"Las políticas de impunidad afectan negativamente no solo a las víctimas, sino a todos los sectores de la sociedad y a la democracia misma", dijo la IHD y concluyó: "Como defensores de los derechos humanos que creen que el derecho a la vida es sagrado y expresamos esta creencia en cada oportunidad que tenemos, continuaremos trabajando para informar e identificar todos y cada uno de los casos de amenazas al derecho a la vida, para informar al público y para defender y desarrollar el respeto por el derecho a la vida".