Mamreşo fue una de las zonas de primera línea más difíciles en la ofensiva guerrillera de Bazên Zagrosê contra la operación de ocupación del ejército turco lanzada en Avaşîn el 23 de abril de 2021. Siete guerrilleros resistieron a las fuerzas invasoras equipadas con la última tecnología armamentística en las posiciones y el sistema de túneles de la colina Şehîd Munzur, que llegaron a utilizar agentes de guerra química. El comandante de la unidad guerrillera que defendió sus posiciones durante diez días contra los ataques, que violaban el derecho internacional, era Kamuran Alpsar, al que los guerrilleros llamaban Serhat Giravî.

Serhat Giravî nació en 1989 en la provincia kurda de Hakkari y fue uno de los valientes miembros de la tribu Giravî que dedicaron su vida a la lucha por la liberación del Kurdistán. Se unió a la guerrilla en 2011 y pasó casi toda su vida guerrillera en los Montes Zagros. Durante este tiempo, siempre estuvo en primera línea, especialmente en la región de Avaşîn. En las cumbres de los Zagros, aprendió la estrategia de guerrilla contra el enemigo y se convirtió en un comandante. Con el tiempo, las personas adoptan el carácter del paisaje en el que viven. Serhat, como los montes Zagros, era erguido, indomable y resistente. Con cada paso, con cada bala que disparaba contra el enemigo, se asemejaba más a los Zagros, y las montañas lo sujetaban más y más.

Cuando el 23 de abril comenzó la operación militar turca en Avaşîn, Serhat Giravî era el comandante de zona de Mamreşo. Lo primero que comunicó por radio a todas las unidades de Avaşîn cuando las tropas turcas fueron lanzadas desde helicópteros fue: "Mamreşo se convertirá en una tumba para el enemigo". Su determinación y esta afirmación al principio fueron cruciales para el curso de la invasión y el destino de la ofensiva defensiva. Serhat coordinó la batalla librada en el sistema de túneles y al mismo tiempo contribuyó a la moral de todas las fuerzas guerrilleras que siguieron la acción de la guerra. Serhat Giravî, junto con Sarya Diyar, Rûken Zagros, Kamuran Amed, Canfeda Hesekê, Zafer Tolhildan y Xebat Aso, que lucharon bajo su mando, representan la invencible voluntad apoísta.

El ejército turco se vio impotente ante la resistencia dirigida por Serhat. Para obligar a los combatientes del túnel a rendirse, probó métodos que tal vez nunca se habían probado en una guerra. Sin embargo, no tuvo éxito. Ante el sistema de túneles de Mamreşo, sufrió una pérdida de prestigio y cometió un crimen de guerra al utilizar agentes químicos de guerra. El mensaje que el comandante Serhat y sus compañeros dejaron al mundo tras diez días de resistencia es: "¡Los Montes Zagros son invencibles para los ocupantes!".