Este domingo, se informó que los aviones de guerra turcos mantienen sus bombardeos en los alrededores de la ciudad. En la jornada de ayer, varias casas de familias fueron atacadas por los cazas.
El sábado por la mañana, la aviación turca también bombardeó la principal ciudad de la región kurda. Durante el día no se pudo saber el número exacto de víctimas y heridos.
Desde el 20 de enero pasado, el gobierno del presidente turco Recep Tayyip Erdogan ordenó el bombardeo masivo contra Afrin, una zona caracterizada por ser una de las más pacíficas de Siria, en medio de una guerra que ya lleva siete años. Debido a los ataques turcos, cientos de miles se refugiaron que había llegado al cantón desde todo el país tuvieron que escapar.
La agencia de noticias ANHA informó que al menos 450 soldados turcos y mercenarios aliados de Turquía fueron abatidos en las últimas 48 horas.
Según las cifras, los dos últimos días han sido los más violentos desde el comienzo de los ataques de Turquía.
Ante el avance del ejército turco y el recrudecimiento de los bombardeos, los pobladores de Afrin comenzaron a movilizarse para defender la ciudad. Según la agencia de noticia ANF, este domingo varios convoyes de vehículos fueron organizados por los ciudadanos y recorrieron la ciudad para invitar a todos a unirse un escudo humano para defender la región.
Por su parte, el copresidente del Partido de la Unión Democrática (PYD) Shahoz Hesen alertó que Turquía comete un genocidio en Afrin, al mismo tiempo que convocó a los pobladores a resistir la invasión.
“La gente de Afrin resiste la invasión de Turquía en los últimos 50 días. El ejército turco tiene como objetivo masacrar a la población de Afrin y obligar a la gente del norte de Siria a rendirse”, denunció Hesen.
El dirigente convocó a todos los kurdos a dirigirse a los frentes de resistencia de Afrin.
En tanto, Ilham Ehmed, copresidenta del Consejo Democrático Sirio, advirtió que los kurdos de Afrin se “enfrentan a un genocidio”.