Vigilia en la frontera entre Sinjar y Rojava para exigir su reapertura

El corredor humanitario fue abierto en el 2014 tras la matanza del ISIS en Sinjar. El gobierno central de Irak cerró el paso en diciembre de 2018 y desde entonces la población exige su reapertura.

Durante dos semanas, un grupo de personas han organizado una vigilia en la frontera entre Sinjar y Rojava para exigir la reapertura del corredor humanitario. Los activistas han instalado una carpa en la que realizan la vigilia. Los esfuerzos diplomáticos de los miembros de la administración kurdos de Sinjar en Baghdad han sido infructuosos hasta ahora.

El corredor humanitario entre Sinjar y Rojava fue abierto por la guerrilla de las YPG/YPJ cuando el ISIS asaltó el asentamiento yazidí en el norte de Irak el 3 de agosto de 2014, asesinando a miles de civiles. El 15 de diciembre de 2018, la frontera fue cerrada por el gobierno iraquí. El pueblo de Sinjar protestó la decisión y consiguió una reapertura temporal. Pero poco después volvió a cerrarse.

Semalka, otro paso fronterizo entre Kurdistán Sur y Rojava, está controlado por el partido de Barzani el KDP y por tanto está sujeto a la arbitrariedad de las autoridades.