Según los abogados, el Estado no supervisa las toneladas de alimentos transportadas fuera del país por la IHH que está detrás de las bolsas de azúcar y harina que compra la gente.

Aviso emitido

El ministro del interior turco Suleyman Soylu ha enviado una notificación a la comandancia general de la gendarmería y a las direcciones generales de la policía anunciando embargos de alimentos en 32 provincias incluyendo Agri, Batman, Bingol, Bitlis, Amed, Elazig, Erzincan, Erzurum, Van, Trabzon, Giresun y Gumushane.

La notificación dice: “Compras a granel de alimentos como harina, azúcar, productos enlatados, halwa o mermeladas, en tiendas de ventas a granel o en supermercados, serán supervisadas por las fuerzas de seguridad. Camiones, furgonetas, minibuses, y otros vehículos sospechosos, serán minuciosamente registrados en los controles de carretera. Las personas que tengan en su posesión comida o necesidades básicas que puedan ser utilizadas por organizaciones terroristas serán interrogadas con el fin de saber dónde viven, qué ruta están realizando y el número de personas a las que están proveyendo con dichos alimentos.”

“Todo el mundo declarado sospechoso potencial”

El abogado Emal Demir ha dicho que esta situación supera a lo de los años 90: “En los 90 solamente se supervisaba el consumo, pero ahora casi todas las fábricas que producen alimentos y necesidades básicas quedarán bajo control. Esto es verdaderamente un embargo. ¿A qué ciudadanos inspeccionarán y en base a qué criterios? Es hora de idear vías más sensatas, no políticas que afecten de forma adversa en la vida de las personas convirtiéndolas en sospechosas potenciales. En nuestras aldeas, la gente se está preparando para el invierno y comprando sus necesidades básicas a granel, como por ejemplo 20 o 30 bolsas de harina o azúcar, porque el acceso al centro de la ciudad es limitado. Y ahora, ¿detendrán a estas personas y las interrogarán por comprar a granel? Esto es una práctica propia de la ley marcial. ¿Están inspeccionando las toneladas de alimentos que transporta la IHH? ¿Cómo puede prohibírsele a los ciudadanos algo que a ellos les está permitido?

“Personas con detenciones previas enfrentan tiempos difíciles”

El abogado Feyzi Celik ha declarado: “De acuerdo con la Constitución, los ciudadanos tienen libertad económica para cubrir sus necesidades. No existen obstáculos legales contra la compra de cualquier cantidad de alimentos que la gente quiera comprar. Si alguien ha sido detenido en el pasado, se enfrentará a tiempos difíciles a la hora de adquirir productos básicos y alimento. No hay bases constitucionales que sostengan esto, la gente tiene derecho a adquirir sus necesidades básicas y alimentos. Tales prácticas no tienen cabida ni bajo la ley marcial. Es una medida administrativa arbitraria. No pueden haber restricciones en la adquisición de bienes bajo la ley marcial o el estado de emergencia. Esto es completamente arbitrario”.