El pueblo de Shengal exige la liberación inmediata de los periodistas Marlene y Matej

"Irak quiere impedir que se conozca a la sociedad yazidí deteniendo a los periodistas", dicen los habitantes de Şengal tras la detención de Marlene Förster y Matej Kavčič en el norte de Irak.

El 20 de abril, Marlene Förster y su colega esloveno Matej Kavčič fueron detenidos en la principal zona de asentamiento yazidí de Şengal por las fuerzas de seguridad iraquíes y trasladados a Bagdad. Ambos llevaban meses investigando el desarrollo social de la comunidad yazidí tras el genocidio perpetrado por la milicia terrorista "Estado Islámico" (ISIS) contra la etnia en 2014. Al parecer, las autoridades iraquíes la acusan de "apoyo terrorista". Una semana después de su secuestro, se supo que Marlene Förster estaba retenida en la sede del servicio secreto iraquí.

Personas de Şengal, que conocen a los dos por su trabajo en la región, han comentado el caso a la agencia de noticias RojNews. Creen que con la detención de los periodistas, el gobierno iraquí quiere evitar que el destino de los yazidíes se haga público.

 

Şoreş Şengalî es músico y trabaja en el Instituto Autónomo de Arte y Cultura de Şengal. Dice que conoció a los dos periodistas cuando visitaron el instituto: "La detención pretende impedir que se hagan públicas las voces y los colores yazidíes, la cultura y la larga historia de genocidios contra el pueblo yazidí. Los dos periodistas han investigado sobre nuestra cultura e historia y han vivido entre nosotros. Su deseo era dar a conocer la cultura de Şengal. Marlene subrayó que su objetivo era dar a conocer nuestra cultura en Alemania".

El músico condena la detención y dice: "El gobierno no quiere que nuestra cultura se difunda por el mundo. Pido a los gobiernos de Alemania y Eslovenia que tomen medidas rápidas para la liberación de sus nacionales. Los responsables de las detenciones pretenden destruir la cultura yazidí".

Tehsîn Şengalî también se ha reunido con Marlene Förster y Matej Kavčič. Trabaja en el Instituto de Salud y dice: "Ambos periodistas se quedaron en Şengal, recogieron material de archivo y se interesaron por cómo vive y reconstruye su país la gente de aquí. Participaron en las celebraciones del Año Nuevo yazidí (Çarşema Sor, Miércoles Rojo). En realidad, a los iraquíes no les interesa detenerlos. Esto da una mala imagen de Irak e impide que la gente quiera venir aquí. Los gobiernos alemán y esloveno deben intervenir ya.

Queremos que los periodistas sigan viniendo aquí, para investigar y conocer nuestra situación. Queremos que se conozca en general lo que nos pasó a los yazidíes, que se escriban libros sobre ello, que puedan ser leídos por nuestros hijos en el futuro. Marlene Förster y Matej Kavčič han querido ser nuestros portavoces y apoyarnos. Es injusto acusarles bajo falsos pretextos. Deben ser liberados lo antes posible".