La periodista Kibriye Evren detenida y bajo custodia desde el 9 de octubre de 2018 como parte de una investigacion llevada a cabo por La Oficia del Fiscal de Diyarbakir, inició una huelga de hambre el 16 de diciembre.

Junt con la presa política Evin Caya, lleva 40 días en huelga de hambre en la prisión de Diyarbakir Tipo E.

Evren se unió a la huelga de hambre iniciada por la diputada del HDP por Hakkari Leyla Güven, quien ha estado ayunando durante 79 días para exigir el fin del aislamiento contra Abdullah Öcalan.

"Estamos decididas"

Evren dijo en un mensaje que envió: "La situación de Leyla Güven se ha vuelto tan grave que ya no puede caminar sola y ha alcanzado una etapa crítica. No la proporcionan vitamina B1 con la excusa de que no hay un "presupuesto" para esta. Cada día que pasa, su situación empeora como nuestra, pero nos embarcamos en esta acción libremente. Y nuestra determinación aumenta cada día".

El mensaje añadió: “El aislamiento contra Abdullah Öcalan debe terminar y tiene que cumplirse su derecho a la libertad de expresión y comunicación con su familia y abogados. Esto no es un privilegio sino un derecho universal ”.

En su mensaje, Evren también dijo: “Como periodista, si fuera libre, haría todo lo que estuviera en mis manos para convertirme en la voz de los huelguistas de hambre y transmitir su mensaje a la sociedad. Sin embargo, como periodista en prisión, soy consciente de lo que se me exige. Reclamamos nuestras demandas legítimas mediante el uso de nuestros cuerpos. En este sentido, como periodista que siente el pulso de la sociedad, sé que, dadas las oportunidades en la cárcel, esta es la expectativa de la sociedad".

"Políticas genocidas"

El aislamiento, dijo Evren, "se ha profundizado y empeorado desde la visita concedida en 2016 al Sr. Öcalan. Hace poco se le permitó una breve visita de su hermano, pero no fue un paso suficiente para solucionar el problema. Se ignoran las reivindicaciones y se profundizan los problemas. Este enfoque es extremadamente peligroso y es una práctica ilegal incluso bajo el sistema legal actual. Es la parte más importante de las políticas de genocidio ”.

Evren añadió: “El aislamiento de una persona con una misión histórica, como el Sr. Öcalan, es un problema universal. Se están organizando acciones en todo el mundo para reclamar una solución a este problema.

El resultado de esta acción puede tener consecuencias irreversibles para nosotros. La vida de Leyla Güven está amenazada. Hay un nuevo período histórico en las cárceles. Lo importante es que el patrimonio político que nos va a dejar. La memoria del mundo es siempre más fuerte que la historia escrita por los gobiernos. Los que se resisten están escribiendo esta memoria ".