Según la agencia de noticias Nujinha, 48 presas políticas de la prisión de Evin iniciarán esta noche a las 22:00 horas una huelga de hambre contra el creciente número de condenas a muerte. La huelga durará hasta las 22:00 horas de la noche del 25 de septiembre.
El número de personas ejecutadas en Irán está en su nivel más alto desde 2015. Entre las y los condenados a muerte se encuentran periodistas, defensores de los derechos humanos, manifestantes y activistas políticos.
Según Amnistía Internacional, el número de ejecuciones en 2023 fue el más alto desde 2015, con un aumento del 48% en comparación con 2022 y un aumento del 172% en comparación con 2021.
En un nuevo informe de investigación publicado el 4 de abril, la organización informó de al menos 853 ejecuciones en 2023. Las cifras registradas por Amnistía Internacional son estimaciones mínimas; es probable que el número real de ejecuciones sea mayor.
La ola de ejecuciones en Irán no ha cesado desde principios de 2024. En agosto, 29 personas fueron ejecutadas en un solo día. Las organizaciones de la sociedad civil denuncian que el Estado iraní se ha convertido en una "verdadera máquina de matar".
Según Diana Eltahawy, directora adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África, la República Islámica de Irán “utiliza la pena de muerte como herramienta de presión política para difundir el miedo entre la población”.