8 de marzo en Amed: 'Defendemos la vida contra el feminicidio, la libertad contra el aislamiento'

Saliha Aydemir: “Mientras existan las mujeres, el fascismo no podrá institucionalizase en este país”.

Miles de mujeres del bastión de la resistencia kurda de Amed se concentraron ayer bajo el lema ‘Defendemos la vida contra el feminicidio, la libertad contra el aislamiento’ para conmemorar el 8 de marzo. La concentración, organizada por la Plataforma de Mujeres de Dicle Amed (DAKP), una alianza formada por el Movimiento de Mujeres Libres (TJA), el Consejo de Mujeres Jóvenes del HDP, el Consejo de Mujeres Progresistas, la Asociación de Mujeres Rosa y la Academia de Mujeres, tuvo lugar en la plaza de la estación de Amed y se desarrolló entre una fuerte presencia policial en la que no faltaban vehículos blindados y cañones de agua.

La concentración comenzó con bailes al son de música kurda. Después, Songül Kapancı dio el discurso inaugural en nombre del Comité de Organización y dijo: “Saludamos a todas las mujeres pioneras que lucharon por los derechos de las mujeres antes que nosotras pavimentando nuestro camino, a todas las que resisten en las cárceles, a aquellas mujeres que embellecen la vida con sus luchas y a todas las compañeras que dieron su vida en la resistencia. Estamos aquí y estamos unidas, recorriendo juntas nuestro camino y acercándonos a la vida libre con cada paso que damos”.

Después del discurso de Kapancı, se leyó un mensaje de la Marcha de Mujeres del Mundo que decía: “La pandemia nos muestra lo inestable que es el capitalismo neoliberal. Este virus de la desigualdad demuestra la urgencia por la que las mujeres llevan años luchando: destruir este sistema para defender la vida. Nuestras luchas son una sola: por una economía feminista, la solidaridad, el trabajo en red, la independencia, la autonomía y el poder popular. Luchamos por un mundo libre de explotación y jerarquías en todo el mundo, el 8 de marzo y todos los días del año. Resistimos para vivir y recorrer nuestro camino hacia el cambio”.

En su discurso, la diputada Saliha Aydemir, quien es también co-presidenta del Partido de las Regiones Democráticas (DBP), enfatizó que las mujeres de Kurdistán nunca se apartarán de su oposición a la violencia patriarcal y la cultura de la violación estatal, y la lucha por el reconocimiento del feminicidio como un crimen contra la humanidad. Aydemir saludó a sus “impresionantes” compañeras Ayşe Gökkan, Leyla Güven, Figen Yüksekdağ, Gültan Kışanak y Sebahat Tuncel, quienes “están entre rejas únicamente por defender la paridad de género, el principio de igualdad de género y la libertad”.

La parlamentaria continuó denunciando las políticas gubernamentales anti-kurdas, misóginas y con una orientación “exclusivamente bélica”, y atestiguó el “miedo crónico a las mujeres" que hay en el Palacio presidencial y que se ha vuelto a poner de manifiesto en las recientes oleadas de detenciones. Además, Aydemir señaló la total privación de derechos y las condiciones “inhumanas” en las cárceles turcas, así como la huelga de hambre de los presos políticos.

“Esta acción, que al mismo tiempo busca acabar con el aislamiento de Abdullah Öcalan en Imrali y defender los derechos de los presos en las cárceles, suma 102 días de resistencia. Tampoco nosotras nos echaremos atrás en nuestra exigencia de acabar con el aislamiento. Para nosotras, cada día es el 8 de marzo. Mientras nosotras estemos luchando, el fascismo no podrá institucionalizarse en este país. Estamos decididas a acabar con el aislamiento de Imrali”.