Mujeres organizadas en la Alianza Internacional de Mujeres se reunieron en Hamburgo-Altona el miércoles para dar un discurso y llamar la atención sobre el aumento de la violencia contra las mujeres en el mundo.
Las voces de las mujeres se alzaron, al igual que se hacen cada vez más fuertes en todas partes, y que intentan deliberadamente silenciar. Un ejemplo de la situación actual es lo sucedido en Turquía. Ya sea la ola interminable de redadas y arrestos, en la que las mujeres del movimiento kurdo son atacadas, o los ataques y la criminalización en Viena contra la política antifascista. Allí también, las estructuras feministas fueron atacadas primero.
Las tendencias de una política misógina son cada vez más claras en todas partes. El creciente número de femicidios es aterrador y hace que el cambio sea indispensable. Cada semana hay nuevos informes de ataques y asesinatos de mujeres.
En la concentración, también se criticó la cooperación interminable entre la República Federal de Alemania y Turquía, ya sea a través de la cooperación económica o la exportación de armas con países en guerra con Rojava. "Mientras que los campos de refugiados como Makhmur son atacados por Turquía con armas alemanas, Alemania permanece en silencio sobre estas violaciones de derechos humanos y no se pronuncia", expresó una de las oradoras de la actividad y agregó que "No responder es también una forma de respuesta. El silencio de Alemania ante los crímenes de guerra lo hace en parte responsable de la actual situación. Es por eso que las mujeres de todas las edades se reúnen hoy para señalar estas quejas y alzar sus voces contra la injusticia imperante".