El domingo finalizó el campamento de verano de Jineolojî ‘Leyla Agirî’ celebrado en Wendland, en el que participaron 50 mujeres. En la última noche del campamento, realizaron una declaración conjunta de solidaridad exigiendo el cese inmediato de los bombardeos y los ataques de ocupación por parte de Turquía contra Bashur, Shengal y Rojava, así como la liberación inmediata de las activistas por los derechos de las mujeres Xewla Mihemed Hesen, Ciwana Ebdulbaqî y Seyran Ehmed Hesen.
Xewla Mihemed Hesen y Ciwana Ebdulbaqî son representantes de la junta directiva de la organización de mujeres RJAK (Rêxistina Jinên Azad a Kurdistanê) en Bashur, y Seyran Ehmed Hesen forma también parte de la organización. Las tres mujeres fueron detenidas el 4 de agosto de 2021 por las fuerzas de seguridad del KDP cuando regresaban de un acto conmemorativo del genocidio del ISIS en Shengal. Desde entonces, permanecen desaparecidas y no se dispone de información sobre su paradero.
En la declaración de solidaridad se pide al KDP que libere inmediatamente a las activistas por los derechos de las mujeres. Algunas de las mujeres que participaron en el campamento de Jineolojî conocieron a las tres mujeres “desaparecidas” en una reunión en Suleymaniya celebrada en junio durante un viaje de la Delegación de Paz a la región.
Una de las participantes en el campamento dijo a ANF: “Cuando conectamos, incluso a través de países y continentes, surge una gran fuerza. Esta conexión también surgió cuando algunas de las participantes en este campamento de Jineolojî viajaron a Bashur en junio como parte de la Delegación de Paz. Mantuvimos conversaciones con familiares de los mártires, Madres de la Paz, políticos, activistas y representantes de la organización paraguas del movimiento de mujeres RJAK”.
Las participantes en el campamento consideran que la detención de las activistas de Bashur es un ataque contra las estructuras de las mujeres organizadas: “Esto demuestra hasta qué punto las mujeres organizadas somos una espina en el costado de quienes están en el poder”.
La declaración también condena los ataques de Turquía en Bashur, Shengal y Rojava: “Los bombardeos y las ocupaciones de Turquía deben detenerse inmediatamente. ¡Defendamos el Kurdistán!”