Züleyha Gülüm, diputada por Estambul del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), ha hablado con ANF sobre la represión del gobierno turco contra el movimiento feminista.
Ataques multifacéticos
Gülüm ha afirmado que las agresiones contra las mujeres han aumentado en los últimos tiempos en Turquía: “Por un lado, vemos que se violan nuestros derechos y se revoca el Convenio de Estambul. Por otro, vemos que se ha producido una oleada de ataques contra las mujeres kurdas y las mujeres feministas que luchan por la libertad de la mujer. El gobierno intenta impedir nuestras actividades y eventos mediante detenciones y arrestos. Los ataques contra las mujeres se han vuelto multifacéticos”.
La lucha de las mujeres kurdas preocupa al gobierno turco
Gülüm ha señalado que la operación de genocidio político contra las mujeres integrantes de Tevgera Jinên Azad (TJA) forma parte de esta nueva oleada de ataques: “El ataque del 25 de noviembre, que tuvo lugar justo antes de las detenciones, la represión gubernamental y las decisiones tomadas están todas muy interconectadas. Aunque se silenciaron nuestras voces, se prohibieron todas nuestras actividades y marchas, y los edificios del partido permanecieron bajo bloqueo policial, no retrocedimos en nuestra lucha. Recientemente se llevó a cabo una operación de detención contra compañeras del TJA. El objetivo principal de la operación era intentar silenciar a las mujeres. El gobierno tiene miedo de la lucha por la libertad de las mujeres y se siente muy incómodo con ella. En particular, la lucha de las mujeres kurdas es aún más problemática para el gobierno. La lucha de las mujeres kurdas ha sido elogiada en todo el mundo. Ha inspirado a mujeres de todo el mundo con el lema ‘Jin, jiyan, azadi’ (Mujer, vida, libertad). El gobierno llevó a cabo una operación porque se sentía incómodo al respecto. Todos y todas sabemos muy bien que las investigaciones sobre las mujeres carecen de base jurídica. Al fin y al cabo, el poder judicial está bajo la influencia del gobierno”.
Métodos de guerra especial
Gülüm ha señalado que la resistencia de las mujeres en Rojhilat (Kurdistán iraní) e Irán es muy fuerte y se ha extendido a otras partes de la sociedad. “Actualmente, la resistencia de las mujeres promueve demandas de libertad. Continúa una fuerte resistencia contra todos los mecanismos de opresión, la corrupción y las estructuras de poder dominadas por los hombres. En Turquía, la lucha por la libertad de las mujeres y la lucha feminista han cobrado mucha fuerza. El gobierno siempre ha tenido miedo de la lucha por la libertad de las mujeres, pero este miedo ha aumentado tras la lucha de las mujeres en Irán. El gobierno está especialmente alarmado porque las recientes protestas masivas contra el gobierno en Irán se han inspirado en el movimiento de las mujeres kurdas. Las mujeres kurdas son un objetivo específico. Aparte de las recientes operaciones policiales contra las mujeres, también se aplican métodos de guerra especiales contra ellas”.
Tratarán de silenciar a las mujeres
Gülüm ha subrayado que si el gobierno gana las próximas elecciones, se institucionalizará el fascismo: “El gobierno está tratando de silenciar a todos los grupos de oposición para institucionalizar el fascismo. Como las mujeres han organizado una oposición muy fuerte, el gobierno intentará primero silenciarlas a ellas. Pero también les resulta difícil justificar esta represión. Y a pesar de toda esta oleada de ataques, el 25 de noviembre vimos muy claramente que las mujeres no retrocedieron en su lucha”.