Anna Campbell (Hêlîn) cayó mártir el 15 de marzo de 2018 en la defensa de la ciudad de Afrin. Dio su vida en la lucha por la libertad. Mucho se ha especulado sobre las circunstancias de su muerte, pero un testigo presencial confirmó que murió cuando la noqta (posición) que defendía fue bombardeada por la artillería turca.

Anna decidió ir a Rojava para unirse a las Unidades de Defensa de la Mujer (YPJ) en la lucha contra el Estado Islámico en mayo de 2017. Originaria de Lewes, en East Sussex (Reino Unido), era fontanera de profesión, pero realizó muchos otros trabajos precarios como la mayoría de los jóvenes en Europa.

Anna era una luchadora por la libertad, que era su verdadera vocación. Participó en muchas luchas y movimientos políticos. Anna se identificó con los movimientos antiautoritarios. Muchos la describen como anarquista, feminista, queer y antiespecista. Anna formó parte del colectivo Empty Cages Collective, un grupo de orientación anarquista que lucha por la abolición de las prisiones y contra el encarcelamiento como modelo de negocio. Participó activamente en muchas campañas contra las prisiones, como Community Action on Prison Expansion, Smash IPP y Bristol ABC (Anarchist Black Cross). Anna creía en la abolición de las prisiones como parte de un problema mayor, que es el sistema de opresión en el que vivimos.

Además, Anna también participó activamente en la lucha contra la caza del zorro, una práctica sangrienta pero habitual en el Reino Unido. Anna intentaba ser lo más coherente posible con sus ideas antiespecistas, tratando de no herir ni matar a ningún animal. Buscaba la libertad de todos los seres vivos del planeta desde una visión no antropocéntrica. Anna también participó en el sindicato IWW (Industrial Workers of the World), siendo una "organizadora clave" en palabras de la propia organización.

Anna llegó a Rojava justo en el momento en que Turquía, con la complicidad de Estados Unidos, lanzó un ataque contra la base de las YPG / YPJ en la montaña de Qereçox. Miembros clave de las milicias de autodefensa perdieron la vida durante el bombardeo de la aviación turca. Por este motivo, a Anna se le ofreció el nombre de Hêlîn, en honor a una de sus compañeras que cayó en el ataque turco. Hêlîn significa "nido" en kurdo. Más tarde, decidiría elegir el apellido Qereçox, el mismo que usaban todos los combatientes internacionalistas de las YPG que habían cruzado la frontera con ella en aquellos días.

Anna llegó con la intención de unirse a las Unidades de Defensa de la Mujer (YPJ) y luchar contra el ISIS. Siempre tuvo muy claros sus objetivos y nunca se rindió a pesar de las muchas dificultades y contradicciones que tiene una mujer internacionalista dentro de las YPJ. Anna tenía una personalidad extrovertida, positiva y abierta, una gran facilidad para establecer relaciones de amistad y confianza con todas las personas con las que se relacionaba. Todos los que la conocieron pueden afirmar que su pasión por la vida, su entusiasmo, eran contagiosos. Desde el primer momento se interesó por estudiar a Abdullah Öcalan y leyó varios de sus libros. Durante la perwerde (educación) siempre intentó escuchar y participar, tratando de abrir la curiosidad intelectual y política a los compañeros y compañeras con quienes compartía la educación de Shervana Nû (Nuevos Combatientes). Hizo un gran esfuerzo por aprender kurmancî. Todas las personas que la conocían se sorprendían de la rapidez con la que aprendía la lengua.