Los feminicidios y la violencia han aumentado recientemente en el Kurdistán del Sur. Según las estadísticas publicadas por las organizaciones de mujeres de Hewlêr, Sulaymaniyah, Duhok y otras regiones del Sur, la mayoría de las víctimas fueron quemadas o asesinadas por sus parejas, hermanos, padres y familiares. Sin embargo, la mayoría de los asesinos quedan impunes.

La miembro de la Academia de Jineolojî Necibe Qedaxî y la periodista Savo Serdar han hablado con ANF sobre los feminicidios y la violencia contra las mujeres en el Kurdistán del Sur. Ambas mujeres consideran que falta organización.

Necîbe Qeredaxî ha revelado que los feminicidios aumentan constantemente. Destacando que la violencia contra las mujeres tiene una historia de miles de años, Qeredaxî ha alegado que la fuente de esta violencia es una mentalidad dominada por los hombres.

“Esta cuestión se ha separado de todas las instituciones sociales, creencias y culturas de la sociedad. En este caso, la mentalidad dominada por los hombres considera a las mujeres como ‘propiedades y esclavas de los hombres’. En consecuencia, intentan que los feminicidios parezca un acontecimiento ordinario en la sociedad. El gobierno también utiliza los feminicidios como propaganda política. Se aprueban leyes contra los feminicidios, pero no se aplican. Utilizan los casos de feminicidios para sus propios intereses políticos. Aparte de las leyes, el gobierno no ofrece ninguna solución para detener estos bárbaros asesinatos contra las mujeres. Esto ha provocado un aumento de la violencia y de los feminicidios”, ha señalado Necibe Qeredaxî.

El silencio provoca un aumento de los feminicidios

Qeredaxî ha explicado además que los feminicidios están aumentando en todo el mundo, pero que están ocurriendo mucho más en el Kurdistán del Sur. “Los feminicidios también están relacionados con las masacres contra las personas y la naturaleza. Por ejemplo, lo que ocurrió en Shengal fue una masacre contra un pueblo. Además, la naturaleza del Kurdistán está siendo saqueada. La naturaleza del Kurdistán ha sido bombardeada con armas químicas prohibidas en los últimos meses, lo que supone una masacre tanto de la gente como de la naturaleza.

Por desgracia, las reacciones a los feminicidios son muy insuficientes. El silencio conduce a un aumento de la violencia y de los feminicidios. Como sociedad, tenemos que encontrar una solución a esto. La población del Kurdistán Sur se opone a los feminicidios, pero no está organizada. Todas las instituciones y organizaciones deben actuar juntas para encontrar una solución al aumento de los asesinatos y la violencia”, ha dicho.

Las mujeres todavía son vistas como objetos

La periodista Savo Serdar ha afirmado que las razones de los feminicidios pueden tener aspectos políticos, sociales y económicos, y que en algunos aspectos también está implicada la cuestión de la fe. Serdar sostiene que la mujer no es vista como un individuo, sino que sigue siendo considerada como un objeto. También ha agregado que el éxodo rural tras el levantamiento en el Kurdistán del Sur no ha modificado la mentalidad machista.

La periodista ha subrayado que la sociedad del Kurdistán del Sur no estaba preparada para resolver problemas sociales de este tipo en aquel momento. “Según la creencia islámica, las mujeres están hechas de las costillas de los hombres. A las mujeres nunca se les ha dado una identidad en la sociedad. Se ignora la existencia misma de las mujeres. En primer lugar, debe establecerse una línea de defensa para las mujeres. Y éstas deben ser conscientes y estar organizadas”, ha concluido.