Madres de los Sabados a 22 años de lucha, piden justicia
En el vigésimo segundo año de su vigilia por justicia, las Madres de los Sábados enfatizaron que continuarán su lucha hasta que el reinado de la injusticia llegue a su fin.
En el vigésimo segundo año de su vigilia por justicia, las Madres de los Sábados enfatizaron que continuarán su lucha hasta que el reinado de la injusticia llegue a su fin.
Las Madres de los sabados han estado sentadas en la Plaza del Galatasaray de Taksim todos los sábados durante 22 años, para que el estado declare que sucedió con sus familiares desaparecidos bajo custodia, y para que los perpetradores sean juzgados.
Durante tres generaciones, no han renunciado a buscar a sus seres queridos durante años. En el invierno, en el verano, en la lluvia y en la nieve, han estado preguntando al estado sobre el destino de sus familiares desaparecidos bajo custodia, con el asiento que sostienen en la plaza del Galatasaray todos los sábados. En lugar de aliviar su dolor, el estado añade más, sus números en la plaza siguen aumentando cada día. Algunas hoy ya no viven, como la mamá Berfo, que cerró los ojos por última vez, mientras la tumba preparada para su hijo estaba vacía. Pero nunca perdieron la esperanza.
Las Madres de los Sábados, cuyos gritos por la justicia han entrado en su 635a semana en la vigilia por la justicia hoy. Con las imágenes de los desaparecidos y las madres que murieron antes de conocer el destino de sus hijos, las Madres de los Sábados, desplegaron una pancarta que decía: "Dejen que los culpables sean castigados", y presentaron claveles rojos a los familiares de aquellos desaparecidos forzados por las fuerzas de seguridad, a través de los años.
Durante la vigilia, las madres enviaron un mensaje de solidaridad a los educadores Nuriye Gülmen y Semih Özakça que fueron detenidos ilegalmente y cuya huelga de hambre continúa en su día 80.
Emine Ocak, madre de Hasan Ocak, que se ha convertido en el símbolo de los desaparecidos, celebró un discurso durante el evento y recordó que ella ha estado sentada en la Plaza Galatasaray desde hace 22 años. Ocak señaló que la oposición en Turquía terminan muertos o encarcelados, y dijo: "Este país no tiene conciencia".
"Heredamos la resistencia de las madres"
Besma Tosun, que ha estado participando en las vigilias del Galatasaray desde su niñez y ahora es una madre, que está exigiendo saber sobre que pasó con su padre Fehmi Tosun, que fue desaparecido bajo custodia, describió que el grito de justicia continúa para la tercera generación de hoy como resistencia, y subrayó que: "Las madres que dejaron esta lucha como un legado para nosotros nos enseñaron a resistir, no sólo aquí sino en todas las áreas de la vida".
Tosun enfatizó que su lucha duradera básicamente tiene como objetivo poner fin a la política de impunidad. Dijo que el gobierno del AKP no accedió a la Convención Internacional de las Naciones Unidas para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas, porque era una parte de este crimen, mientras promovía y concedía impunidad a asesinos. Ella subrayó que no renunciarían a su resistencia y seguirían siendo un haz de luz en todas partes donde hay oscuridad.
22 años
Después de los discursos, Maside Ocak, hermana del nombre de simbólico Hasan Ocak, leyó la declaración y contó lo siguiente sobre la lucha de 22 años en el Galatasaray contra las desapariciones forzadas, el crimen más cruel del estado;
"Mientras cientos de personas fueron desaparecidas por el estado durante los años noventa, nosotros, como personas que las buscaban, nos enfrentamos a una negación sistemática. Hemos aplicado a todas las autoridades pertinentes del estado. Por todas partes fuimos culpados, amenazados, torturados, arrestados, encarcelados, con demandas irreales tales como engañar al poder judicial y dañar a la policía, al ejército y al estado. Frente al hecho de que nuestros esfuerzos no daban resultados, llegamos a la Plaza Galatasaray el 27 de mayo de 1995, negándonos a arrodillarnos ante la mentira, la impunidad y la injusticia, y diciendo "Queremos saber de nuestros familiares desaparecidos".
Crecimos en una resistencia silenciosa diciendo: "Soy humano y tengo derechos" contra el silencio deshonroso que se nos impone. Entregamos esta resistencia de generación en generación y la fortalecimos. Aparecimos ante el público con la responsabilidad de presenciar ese crimen contra la humanidad. Utilizamos nuestro derecho de exponer el hecho de que es una política estatal matar a nuestros seres queridos, ocultar sus huesos incluso de nosotros y conceder a sus culpables la impunidad.
"15 años de injusticia bajos los mandatos del AKP"
Ocak señaló que 15 de los 22 años que pasaron en el Galatasaray, han pasado bajo el gobierno del AKP, cuyo nombre consiste en "Justicia", y dijo: "La independencia de la judicatura y del Estado de derecho se debilitó y el poder judicial se politizó durante el período del AKP en Turquía ".
Ocak exigió la reorganización del Código Penal turco bajo el título de crímenes contra la humanidad, la eliminación de los obstáculos para el enjuiciamiento de los perpetradores y la firma de Turquía de la convención relacionada con la ONU para prevenir nuevos casos de desapariciones forzadas.
Por último, Ocak dijo: "Recordamos una vez más que la creación de una sociedad justa y pacífica depende de afrontar y llegar a un acuerdo con el pasado. También declaramos, una vez más, que continuaremos nuestra lucha hasta que el reinado de la injusticia llegue a su fin".