Aproximadamente 3.500 niños han muerto en el Mediterráneo central en los últimos 10 años
El 18 de abril se cumplen 10 años del catastrófico naufragio frente a las costas de Italia que mató a más de 1.000 personas, incluidos niños.
El 18 de abril se cumplen 10 años del catastrófico naufragio frente a las costas de Italia que mató a más de 1.000 personas, incluidos niños.
Aproximadamente 3.500 niños han muerto o desaparecido intentando cruzar la ruta migratoria del Mediterráneo Central hacia Italia en los últimos 10 años, según las últimas estimaciones de UNICEF. Esto equivale a que un niño pierda la vida cada día durante una década.
Aproximadamente siete de cada diez niños realizan este viaje sin un padre o tutor legal, lo que significa que la mayoría de los niños que murieron o desaparecieron en esta ruta viajaban solos. Sus viajes pueden ser particularmente desgarradores. Según datos de encuestas, más de la mitad de los niños y jóvenes reportan haber sufrido violencia física, y un tercio reporta haber sido retenidos en un lugar contra su voluntad.
Muchos de los niños que intentan cruzar la ruta del Mediterráneo central huyen de la guerra, los conflictos, la violencia y la pobreza, que siguen provocando desplazamientos y obligándolos a buscar seguridad y oportunidades en otros lugares.
"Hace diez años, un naufragio frente a las costas de Italia causó la muerte de más de 1.000 personas y conmocionó a toda la región", declaró Regina De Dominicis, Directora Regional de UNICEF para Europa y Asia Central y Coordinadora Especial para la Respuesta a los Refugiados y Migrantes en Europa.
Los gobiernos deben proteger los derechos y el interés superior de los niños, de conformidad con sus obligaciones en virtud del derecho nacional e internacional. Los derechos consagrados en la Convención sobre los Derechos del Niño no se limitan a las fronteras ni a las costas; acompañan a los niños al cruzarlas.
Al menos 20.803 personas han muerto o desaparecido en el Mediterráneo central en los últimos 10 años. Muchos naufragios en esta peligrosa ruta migratoria desde el norte de África no dejan supervivientes o no se registran, lo que hace que el número real de personas que mueren o desaparecen sea prácticamente imposible de verificar y probablemente mucho mayor.
La gran mayoría de quienes mueren o desaparecen nunca son identificados, por lo que la información sobre sus perfiles es aún más difícil de obtener o verificar.
UNICEF reitera que si bien la adopción del Pacto de la Unión Europea (UE) sobre Migración y Asilo puede dar lugar a un sistema más organizado para gestionar la migración, éste debe implementarse en plena consonancia con las obligaciones legales de defender los intereses superiores de los niños.
UNICEF insta a intensificar las operaciones de búsqueda y rescate, adaptadas a las necesidades de los niños, para prevenir muertes en el mar. A su llegada, todos los niños deben contar con representación legal inmediata y sólidas garantías. Las restricciones de movimiento nunca deben resultar en la detención de un niño en un centro de inmigración, ya sea durante los procedimientos de control, de frontera, de asilo o de retorno.