Argentina atraviesa su segunda quincena de cuarentena, con 1265 casos positivos de COVID-19 y 38 personas fallecidas. El país ya atravesaba altos números de inflación y un 30% de su población está en situación de pobreza, además de la gran recesión económica, por lo cual el impacto social de la cuarentena obligatoria por la pandemia ya se siente fuerte.

Hace unos días, Alberto Fernández, presidente de Argentina, emitió un Decreto prohibiendo los despidos y suspensiones de trabajadores durante 60 días, si causa. Cabe destacar que esta medida abarca a trabajadores formales, y el país atraviesa un momento con un número de trabajadores informales muy alto en la historia reciente.

En el día de hoy comenzó el pago de salarios por emergencia económica que impactará en mas de 3 millones de ciudadanos argentinos.

También hoy el gobierno argentino aumentó las excepciones a la cuarentena a otros rubros y actividades comerciales no esenciales como:

1. Venta de insumos y materiales de la construcción provistos por corralones.

2. Actividades vinculadas con la producción, distribución y comercialización forestal y minera.

3. Curtiembres, aserraderos y fábricas de productos de madera, fábricas de colchones y fábricas de maquinaria vial y agrícola.

4. Actividades vinculadas con el comercio exterior: exportaciones de productos ya elaborados e importaciones esenciales para el funcionamiento de la economía.

5. Exploración, prospección, producción, transformación y comercialización de combustible nuclear.

6. Servicios esenciales de mantenimiento y fumigación.

7. Mutuales y cooperativas de crédito, mediante guardias mínimas de atención, al solo efecto de garantizar el funcionamiento del sistema de créditos y/o de pagos.

8. Inscripción, identificación y documentación de personas.

Por ahora el nuevo periodo de cuarentena obligatoria se extendió hasta el 12 de abril, momento en el que se definirá, según el escenario, como se continúa, en un contexto latinoamericano donde el resto de los países no están practicamente tomando medidas, como el caso de Brasil, o tomaron medidas muy tardíamente, en relación al avance del COVID-19. Actualmente las fronteras de Argentina están cerradas en su totalidad, debido en parte al escenario de los países vecinos.