Carta abierta al Primer Ministro británico: "La voz política del HDP no debe ser silenciada"

La Campaña por la Paz en el Kurdistán ha enviado una carta abierta al Primer Ministro británico sobre el juicio de Kobane en la que afirma que la vital voz política del HDP no debe ser silenciada.

La Campaña por la Paz en el Kurdistán ha enviado una carta abierta al Primer Ministro británico, Rishi Sunak, sobre el juicio de Kobane, en la que afirma que la voz política vital del HDP no debe ser silenciada.
La carta decía: "El llamado "Juicio de Kobane" contra el HDP en Turquía, que comienza el miércoles 15 de marzo de 2023, es un juicio cuyo resultado tendrá implicaciones de gran alcance para el futuro de la democracia en el país y para las relaciones del Estado turco con su numerosa población kurda.
El juicio no puede considerarse de forma aislada, sino como parte de las diversas medidas adoptadas por el gobierno del AKP encabezado por el presidente Erdogan contra el HDP, que es el tercer partido político del país y cuenta con un apoyo masivo entre la comunidad kurda. El juicio es, sin duda, un intento del gobierno de debilitar la base electoral del HDP y erosionar su apoyo, hacerlo políticamente ineficaz y, de hecho, eliminarlo de la escena política".
La carta continúa: "Las acciones dirigidas contra el HDP llevan años produciéndose, pero se han incrementado a medida que el país se acerca a las elecciones de mayo, que suponen un desafío a la mayoría de la que disfruta el partido de Erdogan, que ahora está sometido a una mayor presión como resultado de su gestión del reciente terremoto. Si Erdogan no consigue la mayoría en este año de aniversario, se interpretará como una enorme humillación política pública para él personalmente y una gran derrota para el partido que ha dominado la política turca durante muchos años. Este resultado será visto como un repudio al enfoque de Erdogan sobre la cuestión kurda, que ha consistido enteramente en la represión y en tratarlos como enemigos del Estado. " 
Paz en el Kurdistán subrayó que si "el apoyo al HDP se mantiene y obtiene buenos resultados en los comicios de mayo, su éxito podría privar a Erdogan de su mayoría. Erdogan es plenamente consciente de ello y, por ello, ha emprendido una serie de medidas administrativas y acciones legales para garantizar que el partido no pueda funcionar libremente, deteniendo a dirigentes del partido y a miembros electos, y utilizando todos los métodos disponibles para debilitar y obstaculizar las actividades normales y la campaña del partido. El juicio debe considerarse en este marco.
El objetivo último sería prohibir el partido, lo que privaría a los votantes kurdos de una voz fuerte y clara en la política nacional y les negaría toda representación efectiva. Esto supondría un duro golpe para el futuro de la democracia dentro del país y podría provocar un importante malestar social entre la población kurda, anunciando un periodo de inestabilidad política que podría tener consecuencias mucho más amplias más allá de las fronteras de Turquía.
Por tanto, lo que está en juego no es simplemente el futuro de un partido político, sino la estabilidad de un importante aliado del Reino Unido y de lo que es un país estratégicamente importante en una región muy volátil".
El comunicado continúa: "En vista de ello, pedimos al Gobierno británico que ejerza su influencia para garantizar que el HDP no sea ilegalizado y que Erdogan respete plenamente las normas democráticas del país. Los kurdos tienen derecho a votar al partido de su elección. Este es su derecho democrático básico, que han ejercido en sucesivas elecciones votando al HDP en un número cada vez mayor.
El HDP es un partido político responsable plenamente comprometido con la consecución de sus reivindicaciones a través del proceso democrático. Está dando una voz política necesaria a los kurdos y demostrando que sus agravios pueden remediarse mediante una acción política democrática pacífica. Para los kurdos, que sufren una discriminación y un abandono desproporcionados en Turquía, el HDP representa la esperanza".
Paz en el Kurdistán afirmó que "prohibir el partido sería una terrible regresión, que haría retroceder la democracia dentro de Turquía", y continuó: "Sería una dura lección para los kurdos, que ya sienten que el sistema está muy en su contra, y muchos empezarían a perder por completo la fe en el proceso democrático. Las consecuencias de esto deberían ser tan alarmantes para usted como lo son para nosotros".
Paz en el Kurdistán instó al primer ministro británico "a que envíe representantes del gobierno a observar los procedimientos del juicio cuando el tribunal delibere sobre el caso esta semana.
Instamos al gobierno británico a expresar sus preocupaciones al gobierno turco sobre el asunto y las implicaciones más amplias.
Le instamos a que haga todo lo que esté en su mano para garantizar que se siguen y respetan los procesos democráticos en Turquía y que no se priva a los kurdos de esta voz política vital".
Ha habido, con razón, mucha simpatía por el pueblo de Turquía tras el devastador terremoto y su continua difícil situación exige nuestro apoyo, pero igualmente el mundo no puede simplemente ignorar este importante juicio y el ataque directo a los derechos políticos kurdos."