Ha habido un levantamiento popular generalizado desde el asesinato de Mahsa (Jina) Amini, de 22 años, bajo custodia policial en Teherán el 16 de septiembre. Las protestas se intensificaron en Kurdistán Oriental el 26 de octubre, el día 40 después del asesinato de Amini por tortura.
A pesar de las amenazas y la represión mortal de las fuerzas estatales iraníes, miles de manifestantes salieron a las calles.
El jueves (27 de octubre) se produjeron protestas en varias ciudades del este de Kurdistán, en particular en las ciudades de Mahabad, Bokan, Piranşar, Serdeşt, Bane, Seqiz, Diwander, Dêwlan, Kamyaran, Sine, Kirmaşan e Ilam.
Según informes, en Mahabad, las fuerzas estatales abrieron fuego contra las y los manifestantes con balas reales, que incendiaron varias instituciones estatales y bancos. La Oficina del Gobernador estuvo bajo el control de quienes protestaban por un tiempo. Según los informes, las fuerzas estatales iraníes mataron o hirieron a muchos manifestantes durante las protestas.
En la ciudad de Bane, las fuerzas del régimen abrieron fuego contra las y los manifestantes, matando al menos a dos personas e hiriendo a muchas otras.
En la ciudad de Diwander, se produjeron protestas cuando las marchas denunciaron la muerte de dos manifestantes.
En la ciudad de Xuremawa, Loristan, las protestas conmemoraron a una persona llamada Niker Shakeremi 40 días después de su asesinato. Mientras se coreaban consignas contra el régimen durante la protesta en la ciudad, las fuerzas del régimen abrieron fuego contra las y los manifestantes, lo que provocó enfrentamientos.
Las protestas se reanudaron en las ciudades de Birucêrd y Miyandwaw en Loristan.
Además, las fuerzas del régimen tuvieron que retirarse ante la resistencia popular en muchas ciudades.
También se organizaron protestas en Keraj, Mashhad, Erak, Shush, Zahidan y muchas otras ciudades de Irán.
Cientos de personas muertas
Según Amnistía Internacional, al menos ocho personas han sido asesinadas desde el miércoles por la noche, la mayoría de ellas en Kurdistán Oriental.
Dos miembros de Basij fueron asesinados en la ciudad de Amol, provincia de Mazandaran, donde estaban desplegadas las fuerzas paramilitares de Basij.
Según organizaciones de derechos humanos y grupos de oposición, entre 234 y 260 manifestantes, incluidos 29 menores de edad, han sido asesinados desde el 16 de septiembre.
Decenas de miles de personas han sido detenidas durante las protestas que se han extendido a casi 200 ciudades.