Denuncian que decenas de presos sufren intoxicación alimentaria en Amed

Después de comer comida carcelaria, más de 30 presos del complejo penitenciario de Diyarbakır tuvieron que ser hospitalizados debido a una grave intoxicación alimentaria.

PRESOS POLÍTICOS

Después de comer comida carcelaria, decenas de presos detenidos en el complejo penitenciario de Diyarbakır tuvieron que ser hospitalizados debido a una grave intoxicación alimentaria. Según el Colegio de Abogados de Diyarbakır, un total de 32 reclusos mostraron signos de intoxicación el domingo por la noche después de comer pollo. Al parecer, los síntomas eran tan graves que la propia enfermería de la prisión ordenó inmediatamente su traslado al hospital.

Pero no sólo la carne en mal estado provocó el envenenamiento. "Suponemos que las malas condiciones sanitarias son en parte responsables de los síntomas", afirman en una declaración conjunta el Colegio de Abogados de Diyarbakır, la Asociación de Abogados por la Libertad (ÖHD) y la Asociación de Derechos Humanos (IHD). "Para compensar la pérdida de líquidos y electrolitos debido a los vómitos y la diarrea, los prisioneros consumían agua corriente de color marrón. Esta es probablemente una de las razones por las que su estado casi podría calificarse de dramático", advirtieron.

32 presos del campus fueron remitidos al hospital con síntomas como vómitos y náuseas, y fueron dados de alta tras recibir tratamiento, según el comunicado, que hizo un llamamiento a las autoridades, diciendo: "Les recordamos una vez más que es responsabilidad fundamental del Estado garantizar que los presos tengan acceso a una alimentación digna y así garantizar su derecho al acceso a la alimentación y a la salud, que es uno de los derechos humanos más básicos. Llamamos a las autoridades, como parte de su deber de cuidado y responsabilidad, a garantizar que casos similares no se repitan".

La intoxicación alimentaria es un problema recurrente en los centros de detención del complejo penitenciario de Diyarbakır. Más recientemente, a mediados de mayo, varios presos tuvieron que ser hospitalizados debido a síntomas similares.