El terremoto destapa la corrupción en el sistema sanitario turco
La corrupción en el sistema sanitario turco ha quedado al descubierto tras el fuerte terremoto que sacudió 11 provincias, causando más de 45.000 muertos y cientos de miles de heridos.
La corrupción en el sistema sanitario turco ha quedado al descubierto tras el fuerte terremoto que sacudió 11 provincias, causando más de 45.000 muertos y cientos de miles de heridos.
La destrucción masiva causada por el terremoto centrado en Maraş ha puesto de manifiesto que el sistema sanitario de Turquía, muy alabado por el gobierno del AKP-MHP, está corrompido. En los primeros días del terremoto, los equipos de búsqueda y rescate no pudieron llegar a las ciudades afectadas y el Ministerio de Sanidad no respondió a los ciudadanos heridos.
Un trabajador sanitario voluntario, que ha estado ayudando a los ciudadanos heridos y traumatizados desde los primeros días del terremoto, explicó a ANF las deficiencias causadas por el seísmo ocurrido hace un mes.
"El ministerio de sanidad no respondió al terremoto"
El trabajador sanitario voluntario declaró que muchos trabajadores sanitarios acudieron voluntariamente a la zona afectada por el terremoto sin que el Ministerio de Sanidad les asignara ninguna tarea, ya que rechazó las peticiones de los trabajadores sanitarios para ayudar a los supervivientes.
"Estamos aquí desde el primer día del terremoto. El Ministerio de Sanidad no ha actuado. La mayoría de los hospitales de aquí sufrieron graves daños, y muchos de nuestros colegas murieron. Los colegas supervivientes estaban ayudando a sus familiares bajo los escombros o estaban heridos. Pero el Ministerio no hacía nada para ayudar a los supervivientes. Quisimos venir a la zona voluntariamente después de enterarnos del terremoto por las provincias vecinas. Algunos de nuestros amigos solicitaron al Ministerio ir a la zona. La mayoría de las asignaciones fueron rechazadas, mientras que nuestros amigos que sí fueron asignados esperaron durante 22 horas a un avión que debía aterrizar en el aeropuerto de Adana. Después del aeropuerto de Adana, esperaron 10 horas, y entonces las autoridades empezaron a enviar a nuestros amigos a las zonas seleccionadas al azar", sostuvo el trabajador.
Asimismo, el trabajador también reveló que los sanitarios que no fueron asignados por el ministerio o que no pidieron permiso al ministerio, llegaron a la zona por sus propios medios. Añadió que llegaron a la provincia de Hatay al tercer día del terremoto.
"La gente y los voluntarios intentaban llegar aquí en un momento en el que faltaba coordinación. Cuando llegamos a la ciudad, nos dimos cuenta de que ni el Ministerio de Sanidad ni el Ministerio del Interior y la AFAD estatal participaban en las operaciones de rescate y socorro", denunció. El voluntario dijo que los soldados enviados a la zona no tenían experiencia en las labores de búsqueda y rescate.
"La gente sacó a sus familiares de entre los escombros por su cuenta"
El voluntario señaló que la gente intentó sacar a sus familiares que estaban bajo los escombros con las grúas que encontraron con sus propios esfuerzos. El trabajador manifestó que los voluntarios como él establecieron relaciones con los supervivientes y les ayudaron.
Añadió que la organización estatal de rescate AFAD sólo puso en marcha labores de rescate en determinados edificios que se derrumbaron tras el terremoto.
"No se proporcionó electricidad, los aseos portátiles llegaron tarde"
El voluntario afirmó que por el momento no hay preocupación por una gran epidemia gracias al trabajo que han realizado en la región con sus propios medios, pero esto no significa que las circunstancias actuales no puedan dar lugar a grandes epidemias.
"En las condiciones actuales no hay epidemia, pero se han registrado algunos casos de sarna. Los piojos también se han vuelto muy comunes. Las aldeas se han superpoblado debido al mal alojamiento, lo que ha provocado un aumento de las infecciones de las vías respiratorias superiores. Los niños se ven especialmente afectados. Hemos informado de infecciones vaginales y fúngicas vaginales debidas a fallos en el acceso a aseos y duchas en aldeas donde no se suministra electricidad a conciencia para que la gente pueda salir. Sin embargo, no podemos hablar de grandes brotes actualmente en las zonas afectadas por el terremoto", afirmó el trabajador sanitario.
Por otra parte, el voluntario informó que habían observado una falta de organización, y añadió que si no se toman medidas rápidamente, pronto podrían estallar grandes epidemias: "Los residuos de los retretes van a parar al río Orontes, lo que puede causar epidemias más adelante".
"Trabajadores sanitarios traumatizados y obligados a trabajar"
El voluntario concluyó: "El Ministerio de Sanidad ha obligado a los trabajadores sanitarios traumatizados y supervivientes del terremoto a trabajar en la zona durante los dos últimos días. No es una situación ética. Mientras intentamos proteger a nuestros colegas aquí, asegurándonos de que no permanezcan más de siete días, el Ministerio de Sanidad no debería mantenerlos ocupados aquí."