En libertad el co-presidente del DBP Keskin Bayındır

El co-presidente del DBP, Keskin Bayındır, está siendo juzgado en Amed por cargos de terrorismo, y se enfrenta a una pena de hasta 15 años de prisión. Al comienzo del juicio, el político kurdo ha sido puesto sorprendentemente en libertad.

Un tribunal turco de Amed (tr. Diyarbakır) ha ordenado poner en libertad provisional al político kurdo Keskin Bayındır. Sin embargo, el juicio contra el co-presidente del Partido de las Regiones Democráticas (DBP) continuará, según anunciaron el miércoles los abogados. Todavía no se ha fijado una fecha para la próxima vista.

Bayındır fue detenido en Amed el pasado diciembre tras una redada policial y registros en sedes del DBP en nueve ciudades, y posteriormente fue enviado a prisión preventiva. La justicia turca acusa al político de 39 años de "pertenencia a una organización terrorista armada", es decir, al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). Si es declarado culpable, se enfrenta a una pena de prisión de hasta 15 años.

En el escrito de acusación, el fiscal se basa en alegaciones, especulaciones y conjeturas. No tiene pruebas reales, y sus acusaciones se dirigen principalmente contra el DBP, cuyo objetivo declarado es representar los intereses de la población kurda y descentralizar Turquía, argumenta la defensa de Bayındır. La mayor parte de las "pruebas circunstanciales" se basan en declaraciones de supuestos testigos, de los que sólo se conoce el nombre de unos pocos. Uno de ellos declaró supuestamente a la policía que el DBP funcionaba como "oficina de reclutamiento" del PKK.

Otro testigo, según la policía, dijo que el DBP, partido hermano del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), amenazado de ilegalización, apoyaba el "objetivo" de la Unión de Comunidades del Kurdistán (KCK, organización paraguas del movimiento de liberación kurdo, a la que también pertenece el PKK) de establecer un Estado kurdo independiente. Los "esfuerzos en esta perspectiva" se llevarían a cabo supuestamente en la sede del partido en Amed, a pesar de que el PKK no reclama un Estado para el pueblo kurdo, sino que aboga por el autogobierno político y la coexistencia cultural sobre la base de su paradigma de nación democrática.

Al iniciarse hoy el juicio, Keskin Bayındır ha rechazado con vehemencia las acusaciones contra él y su partido, afirmando que el proceso se desarrollaba sin base legal y reflejaba básicamente la actitud de la judicatura turca hacia la cuestión kurda, que en Turquía se abordaba exclusivamente con violencia. Ha afirmado que no eran sus acciones políticas ni las de su partido las que eran ilegítimas desde el punto de vista jurídico, sino los ataques de la judicatura y las fuerzas del orden a los derechos democráticos básicos. "Las acusaciones formuladas contra mí van más allá de la razón y la lógica. En particular, la acusación de que participé en acciones prohibidas es absurda", ha afirmado el político.

Bayındır ha aludido así a la participación en un total de catorce sucesos que han sido recalificados como actividades terroristas en la acusación formulada contra él. Entre ellos figuran declaraciones públicas en la prensa contra las operaciones de detención de miembros de la sociedad civil kurda, la destitución y detención de los ex diputados del HDP Leyla Güven y Musa Farisoğulları, un acto en conmemoración de las más de cien personas asesinadas en el atentado del ISIS contra una concentración pacifista en Ankara en 2015, y conferencias del HDP y la Alianza del Kurdistán. Entrevistas concedidas por Bayındır como co-presidente del DBP, por ejemplo sobre la cuestión kurda sin resolver y el aislamiento de Abdullah Öcalan en la isla prisión de Imrali, también se han tomado como prueba de su supuesta pertenencia al PKK.

"Todos estos hechos incriminados fueron demostrablemente legales, por lo que mi participación no constituye un delito penal", ha subrayado Bayındır al final de su discurso de defensa. La fiscalía ha pedido que se mantenga la prisión preventiva sin alegar motivos. El tribunal, sin embargo, no ha accedido a la petición y ha ordenado la puesta en libertad del político. No obstante, tras el juicio, Keskin ha tenido que regresar a la prisión local, donde se han realizado los últimos trámites para su puesta en libertad. A continuación, ha salido de la prisión y ha sido recibido por una gran multitud. Aún no está claro cuándo continuará el juicio contra él.