Una gran multitud recibió anoche el convoy que acompañaba al féretro de Garibe Gezer, la joven presa que murió en circunstancias sospechosas el jueves por la noche en Kandira, rindiéndole un último homenaje a la joven a pesar de la fuerte presencia policial.
El féretro fue llevado a la mezquita de Seyit Hasan.
El hermano mayor de Gezer, Emin Gezer, dijo: “No lloraremos, nos mantendremos firmes”.
Garibe Gezer fue enterrada junto a su hermana Bilal Gezer, que murió en las protestas de Kobanê.
Dirigiéndose a la multitud en el cementerio, la madre de Gezer dijo: “Garibe no es sólo mi Garibe, es una hija del Kurdistán”.
Tras el entierro, la multitud se dirigió a la casa de condolencias coreando consignas.