Inflación en Turquía: oficialmente es del 80 %, extraoficialmente 181 %

Según datos oficiales, la inflación en Turquía es del 80,21 por ciento. Sin embargo, expertos independientes ven la tasa de inflación real en más del 181 por ciento.

La inflación galopante en Turquía continúa sin cesar. Según la Oficina Nacional de Estadística (TÜIK) en Ankara el lunes, la inflación anual en agosto fue del 80,21 por ciento. Los precios de los alimentos aumentaron en un promedio de más del 90 por ciento año tras año. Un mes antes, la tasa de inflación rondaba el 79 por ciento.

Los partidos de oposición acusan al gobierno de embellecer las cifras de inflación y sospechan de una tasa mucho más alta. Los institutos económicos independientes también asumen cifras mucho más altas. El grupo de investigación de inflación ENAG con sede en Estambul incluso calculó la tasa interanual para agosto en 181,37 por ciento. Según el instituto, los precios de varios bienes y servicios solo aumentaron un 23,78 por ciento en el mes anterior. La ropa también es significativamente más cara. Por los abrigos de invierno, por ejemplo, los hombres tuvieron que pagar casi un 31 por ciento más en comparación con el mes anterior.

Lira turca demasiado débil

La tasa de inflación en Turquía está impulsada por varios factores. Desde hace algún tiempo, la débil moneda nacional, la lira, ha estado elevando los precios considerablemente, ya que encarece los bienes importados a Turquía. Los precios de muchas materias primas también están aumentando, sobre todo debido a la invasión rusa de Ucrania.

Bajas tasas de interés para contrarrestar

En opinión de muchos expertos, el banco central turco no está haciendo lo suficiente para contrarrestar la alta inflación. Por el contrario, las autoridades monetarias han estado relajando su política monetaria desde el verano pasado. De acuerdo con la doctrina económica estándar, un aumento en las tasas de interés puede contrarrestar la inflación. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, por otro lado, argumenta que las altas tasas de interés provocan inflación. El banco central está siguiendo la línea de Erdogan y hasta ahora se ha abstenido de subir las tasas de interés. En agosto, el banco central incluso redujo la tasa de interés clave del 14 al 13 por ciento.