A las 00.40 hora local de hoy, el Estado turco mató a siete niños de una familia de nueve personas, junto con su madre y su padre, en un ataque con drones contra una casa en el pueblo de Berxbotan en Kobane.

Los nombres de los asesinados son: Ahîn Osman Ebdo, Dijle Osman Ebdo, Dilovan Osman Ebdo, Yasir Osman Ebdo, Ezîz Osman Ebdo, Saliha Osman Ebdo, Avesta Osman Ebdo, Osman Berkel Ebdo (padre de los niños), Xezal Osman Ebdo (madre). Los nombres de los heridos son: Ronîda Osman Ebdo, Narîn Osman Ebdo. Otros dos sobrevivieron heridos al ataque.

El Consejo Ejecutivo del Congreso Nacional del Kurdistán (KNK) emitió una declaración condenando enérgicamente “esta masacre inhumana” y pidiendo a la Coalición Global contra el ISIS, al Consejo de Europa, a la Unión Europea y a la ONU que intervengan con sanciones contra el Estado turco.

El comunicado del KNK decía lo siguiente:

"El llamamiento del líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan, el 27 de febrero, a la ´Paz y una sociedad democrática´ en Turquía se ha convertido en una fuente de esperanza para los kurdos y el pueblo turco en particular, así como para la comunidad internacional en general. Al asumir un gran riesgo y una gran responsabilidad, Öcalan dio el primer paso hacia la paz. Exigió que el PKK, el partido que él fundó, depusiera las armas. Su partido, el PKK, declaró un alto el fuego unilateral el 1 de marzo.

La respuesta del Estado turco al alto el fuego del PKK, según revelaron las Fuerzas de Defensa del Pueblo Kurdo (HPG), fue la siguiente: los días 15 y 16 de marzo, se bombardearon 503 zonas guerrilleras con armamento pesado, artillería y obuses, con objetivos en la región de Khakurk (230), la región de Gare (29), la región de Metina (83) y la región de Zap (161). Los días 16 y 17 de marzo, la aviación de guerra realizó 18 ataques, con objetivos en Lolan (7), Gare (3), Metina (5) y Zap (3).

El gobierno turco no ha dado una respuesta concreta a la medida de Öcalan durante 18 días y ha respondido al alto el fuego del PKK con ataques.

El 10 de marzo, el portavoz kurdo en representación de las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) firmó un acuerdo conjunto con el Gobierno de transición sirio, haciendo una contribución muy importante a la estabilización de Siria desde el frente kurdo: eligiendo nuevamente el camino hacia la paz y las soluciones políticas.

Por lo tanto, instamos a todos los gobiernos, partidos políticos y demás actores que han acogido con satisfacción el llamamiento a la paz de Öcalan a que actúen de inmediato contra estas medidas provocadoras y peligrosas. El gobierno turco es responsable de mantener bajo control todas las estructuras de su Estado. Al igual que Öcalan asumió el riesgo y la responsabilidad e inició esta histórica medida, esperamos que el gobierno turco ponga fin a estos ataques inhumanos y crueles contra los kurdos. También instamos al gobierno turco a respetar el alto el fuego del PKK. Sobre todo, instamos al gobierno turco a respetar la soberanía de Siria y a acatar los acuerdos internacionales".