Según Abdullah Öcalan, lo que describió como la "Tercera Guerra Mundial" comenzó con la operación llevada a cabo en su contra. Afirmó que su salida forzada de Siria estaba directamente vinculada a la operación de la OTAN-Gladio.

Öcalan enfrentaba dos posibles caminos para abandonar Siria: las montañas o Europa. Creía que elegir el camino de las montañas intensificaría la guerra, mientras que tomar la ruta europea podría abrir posibilidades para una solución diplomática y política. Finalmente, decidió ir a Europa y salió de Siria el 9 de octubre de 1998. Durante los cuatro meses siguientes—hasta el 15 de febrero de 1999—la conspiración internacional, liderada por Estados Unidos e involucrando la estructura de Gladio de la OTAN con el apoyo de varios otros estados, culminó en la captura de Abdullah Öcalan y su posterior traslado a la prisión de Imralı.

Las potencias hegemónicas, junto con los países que las respaldaban, participaron en la conspiración en función de sus propios intereses estratégicos:

• Estados Unidos e Israel, en la ejecución del Proyecto del Gran Oriente Medio y la ocupación de Irak.

• Rusia, debido al proyecto del gasoducto Blue Stream y un préstamo de diez mil millones de dólares del Fondo Monetario Internacional.

• Grecia, a cambio de avances en la resolución de sus disputas con Turquía sobre el mar Egeo y Chipre.

• Otros países involucrados en el complot, cuyas motivaciones no diferían demasiado de las mencionadas.

En este contexto, Abdullah Öcalan, quien durante sus desplazamientos vio el verdadero y oculto rostro de la OTAN, describió la ejecución de la conspiración en su contra como el inicio de la fase más crítica del régimen genocida.

Una de las operaciones más significativas en la historia de la OTAN

En su Quinta Defensa, Abdullah Öcalan abordó la conspiración internacional con las siguientes reflexiones:

*"El período de cuatro meses entre el 9 de octubre de 1998 y el 15 de febrero de 1999 fue intenso y extraordinario. Ninguna potencia, salvo Estados Unidos—el hegemón mundial—habría podido orquestar una operación tan compleja durante esos cuatro meses. El papel de las unidades de guerra especial de Turquía durante este periodo se limitó a trasladarme en avión a Imralı, y aun eso se hizo bajo estricta supervisión. Sin duda, esta fue una de las operaciones más importantes en la historia de la OTAN. Era tan evidente que, dondequiera que iba, nadie se atrevía a adoptar una postura diferente. Quienes lo hacían, eran inmediatamente neutralizados. Incluso una gran potencia como Rusia fue dejada fuera de juego de una manera muy clara. La postura de las autoridades griegas por sí sola explicaba todo.

Las medidas de seguridad adoptadas dentro y fuera de la casa donde me alojaba en Roma eran extremadamente reveladoras. Se impusieron precauciones excepcionales, similares a las de una prisión. Ni siquiera se me permitía dar un solo paso afuera. Equipos especiales de seguridad vigilaban cada rincón, incluso hasta la puerta de mi habitación, las 24 horas del día.

El gobierno de D'Alema en aquel momento era un gobierno de izquierda democrática. D'Alema mismo era inexperto y no podía tomar decisiones por sí solo. Recorrió Europa en busca de apoyo. El Reino Unido le dijo que debía tomar su propia decisión y mostró poca solidaridad. La postura de Bruselas era incierta. Al final, el asunto fue remitido al poder judicial. Era imposible no ver la influencia de Gladio en todo esto. Italia, después de todo, era uno de los países donde Gladio tenía mayor presencia. Silvio Berlusconi movilizó todo su poder. Él era un hombre de Gladio. Sabía que Italia no podía soportar la carga de mi presencia, así que tuve que marcharme.

Como resultado, Turquía se transformó en el aliado más leal—pero también el más dependiente—de Estados Unidos e Israel. Lo que se presentó como una ‘frenética inmersión en la globalización’ no era más que la historia de Turquía siendo entregada al capitalismo financiero global."

El inicio de la operación en Irak

En su defensa, Abdullah Öcalan afirmó que el escenario de la ocupación de Irak estaba estrechamente vinculado a su captura. "De hecho, la ocupación comenzó con la operación en mi contra", dijo. Y continuó:

"Lo mismo se aplica a la ocupación de Afganistán. Más precisamente, la operación dirigida contra mí fue el primer y uno de los pasos más cruciales en la implementación del Proyecto del Gran Oriente Medio. No fue una coincidencia que el primer ministro Bülent Ecevit dijera: ‘Nunca pude entender por qué nos entregaron a Abdullah Öcalan’. Así como la Primera Guerra Mundial comenzó con el asesinato del archiduque de Austria por un nacionalista serbio, de manera similar, la ‘Tercera Guerra Mundial’ se inició con la operación llevada a cabo en mi contra."

Continuará...