El sábado tuvo lugar en Estocolmo, la capital sueca, una manifestación contra las políticas genocidas y las prácticas bárbaras del Estado turco, también para celebrar el décimo aniversario de la revolución de Rojava. Los participantes se reunieron en la céntrica plaza Norra Bangorget y, tras guardar un minuto de silencio, caminaron hasta la plaza Sergels Torget en memoria de los muertos en la lucha de liberación kurda.

La manifestación estaba encabezada por una pancarta en la que se leía "¡No a la política de chantaje de Erdogan!" y otra pancarta con el claro mensaje "Todos somos el PKK". Los participantes llevaban banderas de las YPJ, las YPG y el PKK y fotos de Abdullah Öcalan y coreaban "Erdogan asesino", "No al genocidio en el Kurdistán" y "Bijî berxwedana Rojava" (Viva la resistencia en Rojava). A lo largo del recorrido de la marcha, se hicieron constantes declaraciones y se recogieron firmas para la eliminación del PKK de la "lista de terroristas".

En el mitin de clausura, la portavoz de la asociación de mujeres kurdas en Suecia, YJK-Swêd, Ayşe Dîdar, pronunció un discurso y dijo "Después de las celebraciones de la revolución de Rojava, el asesino Erdoğan quiere desmoralizar al pueblo kurdo con sus masacres de la población civil. Sin embargo, la revolución de Rojava se ha convertido en una revolución de mujeres para todo el mundo."

Rıdvan Altun, miembro del comité diplomático de la Comunidad Democrática Kurda en Escandinavia, se refirió a la última masacre de turistas en Zakho por parte del Estado turco y dijo que aunque el Estado turco intentó atribuir la responsabilidad al PKK, no pudo vender esta mentira al mundo. Altun continuó: "Condenamos el silencio de los países que dicen que los derechos humanos son importantes para ellos. Suecia, en particular, no debería guardar silencio sobre la política de genocidio. Se está negociando sobre el pueblo kurdo en nombre de la defensa de Turquía y todo el mundo debe definir ahora su postura. El pueblo sueco debe ser sensible a las prácticas de Erdoğan".

Según los medios de comunicación turcos, el Ministerio de Asuntos Exteriores turco convocó el sábado al encargado de negocios en funciones de la embajada sueca en Ankara para transmitirle la "aguda reacción" del gobierno turco ante la presencia de "propaganda terrorista" en Suecia. Se dice que el trasfondo es un suceso similar ocurrido en Gotemburgo el pasado jueves.