El empresario turco, defensor de los derechos humanos y activista Osman Kavala ha estado tras las rejas desde el 1 de noviembre de 2017, enjuiciado por cargos de intentar derrocar al gobierno, basado en acusaciones de que organizó y financió protestas a nivel nacional en las manifestaciones de Gezi en 2013 contra el entonces primer ministro turco Tayyip Erdogan.

El 10 de diciembre, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) pidió la liberación inmediata de Kavala, diciendo que no había sospechas razonables de que hubiera cometido un delito. El Tribunal concluyó que los artículos 5/1 y 5/4 y el artículo 18 del Convenio Europeo de Derechos Humanos habían sido violados y dictaminó que Kavala debía ser liberado de prisión de inmediato. El veredicto ha enfatizado que el arresto de Kavala es una violación de derechos.

La quinta audiencia en el caso por las protestas del Parque Gezi continuaron en la 30a Corte Penal de Estambul el martes. El caso involucra a 15 acusados, de los cuales solo Kavala está encarcelado en espera de juicio. Los acusados ​​en el llamado juicio de Gezi están acusados, entre otras cosas, de "intento de derrocar al gobierno" en relación con las protestas de Gezi de 2013. Kavala también está acusado de haber financiado las protestas con ayuda extranjera. Todos los acusados ​​son amenazados con cadena perpetua.

Mientras Kavala expresó su grave preocupación por la actitud de la corte, el panel de jueces rechazó la solicitud de recusación, luego de lo cual los abogados salieron de la sala de audiencias con aplausos en protesta.

El tribunal dictaminó la continuación de la detención de Kavala y programó la próxima audiencia para el 18 de febrero.