Las prácticas racistas contra los kurdos en Turquía toman una nueva dimensión, donde 11 personas acaban de ser enviadas a prisión preventiva por bailar música kurda acusadas de “hacer propaganda para una organización terrorista”.
El sábado día 27 se llevaron a cabo varias redadas domiciliarias en los barrios de Bağcılar, Esenyurt, Sultangazi y Gaziosmanpaşa en Estambul. Como resultado, 18 personas fueron detenidas por bailar halay con música kurda en diversas bodas.
Tras tomar declaración ante la fiscalía, 11 de las 18 personas, todas kurdas, fueron enviadas ante un juez con petición de cárcel acusadas de “hacer propaganda para una organización terrorista”, y las otras 7 fueron puestas en libertad bajo control judicial.
Protestas en Urfa
En Urfa, la organización distrital del Partido por la Igualdad y la Democracia de los Pueblos (Partido DEM) de Karaköprü protestó por las detenciones y las penas de prisión por bailar halay con música kurda.
Allí, Bekir Karakeçili, co-presidente provincial del Partido DEM por Riha, dijo: “Aquellos que aplauden el espectáculo orquestado por el fascismo que se escenifica en las calles, en las bodas, en el Parlamento, en las redes sociales y en todos los ámbitos de la vida están arrastrando a la sociedad a aguas peligrosas”.
Protestas en otras 7 provincias
Protestas con comunicados similares se realizaron también en Pirsûs (Suruç), Xelfêti (Halfeti), Curnê Reş (Hilvan), Serêkaniyê (Ceylanpınar), Wêranşar (Viranşehir), Hewag (Bozova) y Bêrecûk (Birecik). Miembros del Partido DEM, acompañados por numerosas personas, se han estado concentrando frente a las sedes del partido para bailar halay.
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