Tras la anulación del diploma universitario del alcalde de la Municipalidad Metropolitana de Estambul, Ekrem Imamoğlu, y la posterior ola de detenciones, el Partido por la Igualdad y la Democracia de los Pueblos (Partido DEM) visitó la sede del Partido Republicano del Pueblo (CHP) y el Ayuntamiento de Estambul, expresando su firme postura contra lo que describieron como una flagrante injusticia. Sezai Temelli, co-presidente del Grupo Parlamentario del Partido DEM y miembro de la delegación que visitó la municipalidad, enfatizó que se trataba de un nuevo ataque contra representantes electos. Afirmó que el incidente era un ejemplo más de la creciente politización del poder judicial.

En una entrevista con ANF, Temelli afirmó además que se trataba de un nuevo ataque contra la voluntad popular: “Este ataque se está llevando a cabo a través del poder judicial. Una vez más, presenciamos un ejemplo contundente de la profunda politización del poder judicial. En efecto, se ha declarado una guerra, a través del poder judicial, contra la democracia, el derecho al voto y a ser elegido, y a la voluntad popular. Condenamos enérgicamente estos recientes acontecimientos. Durante mucho tiempo, la política de nombramiento de fideicomisarios ha dominado la política en Turquía. Esto debe cesar de inmediato. Es absolutamente inaceptable y no lo aceptaremos”.

Un término que expresa la capacidad de una ciudad para alcanzar el consenso nunca puede ser un delito.

Temelli criticó el intento de convertir el concepto de “consenso urbano” en una acusación penal y declaró: “Al observar las investigaciones iniciadas recientemente y las acusaciones en preparación, todas comparten una característica común: la conspiración. Nos enfrentamos una vez más a un poder judicial que produce conspiraciones infundadas, desconectadas de la realidad y al servicio de intereses políticos mezquinos. Esto es exactamente lo que estamos viendo aquí. El hecho de que nuestro partido esté implicado, o que el "consenso urbano" esté en la mira, es una clara indicación de hasta qué punto ha llegado la ilegalidad. Podemos llamarlo una vergüenza judicial, porque este concepto —sin importar en qué parte del mundo o en qué idioma se utilice— es una noción positiva y legítima, tanto política como socialmente. Se opone al conflicto y la violencia. Un término que expresa la capacidad de una ciudad para alcanzar el consenso nunca puede ser un delito. Hablar de ello como si fuera una noción criminal, intentar fabricar un delito a partir de él, es una verdadera vergüenza para el poder judicial. Es producto de una mentalidad degradada, de una política degradada. Es completamente inaceptable. Y no lo aceptamos”.

Consultamos a la gente y actuamos en consecuencia.

Temelli agregó: “Nuestro partido siempre ha apostado por la transparencia política. No hicimos nada de esto en secreto, así que ¿cómo podría considerarse un delito? Compartimos todo abiertamente con el público. Para nosotros y nosotras, el principio esencial siempre ha sido la voluntad popular. Dijimos desde el principio: cuando la gente se une, cuando hay consenso popular, lo respetamos. Y eso hicimos. Esto no se logró mediante negociaciones a puerta cerrada entre dos partidos. No se basó en intereses mutuos ni regateos, y es evidente quién actúa de esa manera. Consultamos a la gente y actuamos en consecuencia. No solo ocurrió en Estambul. Incluso en lugares donde éramos el partido líder, donde teníamos la victoria asegurada, como Van y Amed, seguimos acudiendo a la gente, consultamos a la ciudad e intentamos incluir todas las dinámicas y voces locales. Por lo tanto, esto siempre ha formado parte de nuestro enfoque político estratégico. Nadie parece recordarlo, pero celebramos elecciones primarias para elegir a nuestros candidatos. Lo hicimos con la gente y juntos elegimos a nuestros candidatos. Creamos plataformas para que la ciudad expresara su propia voluntad y encontrara puntos en común. Por lo tanto, esto no puede, en ningún caso, considerarse un delito. Lo rechazamos rotundamente y nuestra postura al respecto es absolutamente clara”.

Lo que está sucediendo ahora es ilegal, una práctica antidemocrática y un golpe contra la política democrática.

Sezai Temelli también señaló que visitaron la Municipalidad Metropolitana de Estambul y la sede del CHP, y añadió: “Nos oponemos a todo lo que sea antidemocrático, ilegal o ajeno al marco de la democracia. Y jamás cederemos en ese aspecto. Lo que está sucediendo ahora es ilegal, una práctica antidemocrática y un golpe contra la política democrática. El llamamiento del Sr. Öcalan es una oportunidad para que Turquía se democratice, viva en paz y siente las bases de un consenso social amplio. Seguimos actuando en nombre de la democratización, de la paz y de la construcción de una sociedad democrática. Que quede claro: dondequiera que haya un ataque a la democracia, allí estaremos, resistiendo sin cesar”.

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