Aunque se descubrió que el barco hundido pertenecía al presidente de la Gobernación del Distrito de Gevaş, del AKP, no se ha iniciado una investigación al respecto. 

A pesar de la tragedia, el flujo de refugiados iraníes hacia la frontera de Van continúa. Cientos de refugiados entraron en la región el viernes por la mañana. 

“Los contrabandistas de personas están en la forntera y los refugiados caen en sus redes. Cuando vienen, son expuestos a la violencia y la muerte, así como a los abusos de estas mafias", dijo el diputado del HDP de Van Murat Sarısaç, proporcionando información sobre esta situación.

"Hablamos de 100 refugiados en el Lago Van, encontramos cuerpos helados cuando la nieve se derritió. Vemos tragedias similiares cada año, y Turquía devuelve a estas personas a Irán todo el tiempo. Durante las protestas en Irán muchas fueron sentencias a pena de muerte, dos de estas lograron encontrar refugio en Turquía, pero el Estado las envío de vuelta a Irán", señaló Sarısaç.

Comentando el hecho de el barco hundido pertenecía al presidente de la Gobernación del Distrito de Gevaş, del AKP, afirmó: "Sabemos que los mimebros del AKP llevan a cabo todo tipo de corrupciones e irregularidades con la fuerza del gobierno. No hay castigo, hay impunidad. Todo integrante del AKP es intocable y si influencia es ilimitada. Ya no nos soprende".