Un helicóptero del ejército turco abrió fuego contra los pobladores involucrados en el comercio fronterizo en la provincia de Hakkari. El grupo objeto del ataque estaba formado por residentes del pueblo de Çemekurk, en el distrito de Derecik, que regresaban del sur de Kurdistán, al norte de Iraq.

El ataque mató a Vedat Ekinci, de 14 años de edad, que perdió la vida en el acto. Uno de los habitantes del pueblo resultó gravemente herido.

Según se informa, el ataque mortal se llevó a cabo alrededor de las 15.00 horas, hora local. El cadáver del menor fue encontrado por la población local, que se apresuró a llegar al lugar de los hechos después de la agresión. El poblador herido fue puesto bajo tratamiento.

Las fuerzas estatales turcas están cometiendo innumerables crímenes a lo largo de la frontera, gozando de absoluta impunidad. Los autores de ejecuciones extrajudiciales no rinden cuentas ni son condenados por sus delitos. El poder judicial turco absuelve a los autores, lo que constituye una amenaza para las víctimas.

Las ejecuciones en la frontera no son nuevas. En el pueblo fronterizo de Roboski, en el distrito de Uludere, Şırnak, aviones de combate turcos masacraron descaradamente a 34 civiles, 19 de los cuales eran menores, el 28 de diciembre de 2011.