Avesta: «Las mujeres deben fortalecer su autodefensa y volverse más conscientes y organizadas»

Sozdar Avesta, del Consejo Presidencial de la KCK, habla en esta entrevista sobre la Tercera Guerra Mundial en Oriente Medio y la necesidad de que las mujeres se organicen y luchen: «El terror contra las mujeres comienza en casa y llega al nivel estatal».

ENTREVISTA

En esta entrevista, Sozdar Avesta, miembro del Consejo Presidencial de la Confederación de los Pueblos del Kurdistán (KCK), habla sobre la necesidad de que las mujeres se organicen y luchen: «Como dijo Rêber Apo en el pasado, si una mujer no está organizada y se deja a merced de los hombres, no puede sobrevivir. Las mujeres son asesinadas todos los días. No sólo en la guerra, la verdadera guerra contra las mujeres se desarrolla en la sociedad».

La Tercera Guerra Mundial se está extendiendo gradualmente en Oriente Medio. Esta guerra que se libra sigue la mentalidad de los hombres dominantes y tiene como objetivo convertir el mundo en un infierno. En esta guerra, las mujeres son las más oprimidas, pero el mundo hace la vista gorda ante esto. ¿Cómo afecta la guerra a las mujeres?

Rêber Apo [Abdullah Öcalan] habló de la Tercera Guerra Mundial cuando comenzó la intervención en Oriente Medio en 1990/91. Cuando los poderes dominantes quisieron extender la Tercera Guerra Mundial a Oriente Medio en general, desarrollaron la conspiración internacional contra Rêber Apo para eliminar los obstáculos que tenían frente a ellos. Por supuesto, no somos ajenos a esta guerra; somos parte de ella, ya que también se libra contra nosotros y nosotras.

La guerra afecta a todas las sociedades. Como ya hemos dicho, es la mente de los hombres dominantes la que está librando esta guerra. Se está librando una guerra ideológica y política contra la sociedad, en particular contra las mujeres y sus valores. Esta guerra se está librando contra cualquiera que se oponga a la mentalidad de los hombres dominantes. Como usted ha mencionado, las mujeres, los niños, las personas indefensas y la sociedad en su conjunto son los que corren el mayor peligro en esta guerra y genocidio. Esta realidad es crucial y hay que destacarla. La guerra en Gaza lleva más de un año y se puede observar que la mayoría de los muertos son mujeres y niños. En el Kurdistán estamos viviendo lo mismo. La Tercera Guerra Mundial se centra en el Kurdistán. Con el secuestro de Rêber Apo, esta guerra comenzó contra los kurdos. No hay un día sin que se produzca una masacre en el Kurdistán.

La pregunta es: ¿qué tipo de lucha se debe librar para evitar que la mentalidad sucia que libra esta guerra dé resultados? Nuestra lucha es ejemplar en este sentido. Todas las mujeres deben fortalecer su autodefensa y volverse más conscientes y organizadas. Una mujer que no está organizada está condenada a una vida y una muerte horribles. Como dijo Rêber Apo en el pasado, si una mujer no está organizada y se deja a merced de los hombres, no puede sobrevivir. Las mujeres son asesinadas todos los días. No sólo en la guerra, la verdadera guerra contra las mujeres se desarrolla en la sociedad.

Las mujeres son blanco de los tanques y la artillería en la guerra, pero también existe un terror contra las mujeres en la sociedad. El terror contra las mujeres comienza en casa y llega al nivel estatal. Las mujeres deben organizarse con fuerza, unirse y adoptar una postura común contra estos ataques. El movimiento de liberación de las mujeres está luchando bajo el liderazgo del PAJK, el sistema KJK, y las YJA Star, su fuerza de defensa. En esta ocasión, me gustaría felicitar a todas las guerrilleras y mujeres de la libertad por el 32º aniversario de la fundación de nuestro ejército de mujeres libres, YJA Star, que ha llegado hasta nuestros días bajo el liderazgo de camaradas como Beritan, Zilan, Azime, Zelal, Delal, Leyla y Axin.

Hoy, las potencias capitalistas que libran la Tercera Guerra Mundial están atacando a las sociedades con todas sus tecnologías. Como movimiento de libertad, nos oponemos a estos poderes soberanos y luchamos por ello. Está claro cómo deben defenderse las mujeres y cómo deben estar unidas y organizadas. Las mujeres deben desarrollar su poder y organización en todos los campos, ya sea en los pueblos, las fábricas, en las calles, en las escuelas o en todos los ámbitos de la vida. Si esto no sucede, las consecuencias de la guerra serán más severas. Solo podemos detener esta guerra iniciada por la mentalidad de los hombres dominantes con el poder y la lucha de las mujeres. Las mujeres deben confiar en sí mismas. Pueden lograr el éxito si desarrollan una lucha común. Esto es lo que más se debe enfatizar. Porque la mente dominada por los hombres no reconoce nada más que su propio poder. No reconoce la voluntad de las mujeres, no reconoce su existencia, no las ve como iguales. Sólo una lucha común contra esto puede dar resultados.

Vemos cómo mujeres y niños son brutalmente asesinados en Turquía y en todo el mundo recientemente. Recientemente, escuchamos sobre un grupo en Turquía que secuestraba y asesinaba deliberadamente a niños y a niñas. ¿Cómo puede la sociedad salvar a las mujeres y jóvenes de este sistema podrido? ¿Cuáles son las formas y métodos necesarios?

Nos acercamos al 25 de noviembre, que marca el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer. El 25 de noviembre pasó a la historia como un día de masacre. Las hermanas Mirabal, tres hermanas de la República Dominicana, fueron asesinadas por su lucha por la libertad y la igualdad para las mujeres. Conmemoramos respetuosamente a las hermanas Mirabal y a todas las mujeres que fueron víctimas de la mentalidad masculina. Kurdistán también es un lugar donde innumerables mujeres revolucionarias y luchadoras han sido masacradas. Las camaradas Sakine, Leyla, Rojbin, Seve, Fatma, Pakize, Nagihan, Hevrin Xelef, Zehra, Madre Aqide y miles de mujeres en la sociedad fueron asesinadas por la mentalidad dominada por los hombres. No debemos considerar el 25 de noviembre como un día más; la lucha por la libertad de las mujeres requiere continuidad. Esta lucha debe continuar todos los días. Como movimiento de liberación de las mujeres kurdas, cada precio que pagamos es una razón para intensificar aún más nuestra lucha. Todas las mujeres pueden y deben hacer de estas masacres y ataques la base para un nuevo comienzo y una lucha común.

El asesinato de Narin, una niña de ocho años, todavía se está discutiendo, pero el Estado, más precisamente el gobierno, la familia, las sectas y Hizbul-Contra, todos ocultan este asesinato. Todavía no está claro cómo fue asesinada Rojin, una estudiante de Wan. Estas masacres ocurren todos los días ante los ojos del mundo. Apuñalan a las mujeres en la calle y la gente mira.

Siempre decimos que las mujeres deben intensificar su lucha; por supuesto, es lo correcto. El Estado, el poder y el sistema dominado por los hombres están poniendo todo en contra de la libertad de las mujeres. La libertad de las mujeres significa la libertad de la sociedad. Nadie ha ofrecido tantas oportunidades en este sentido como Rêber Apo. Su filosofía e ideología han supuesto un gran avance en la libertad de las mujeres. Los ataques contra las mujeres son ideológicos, son ataques contra la libertad de las mujeres.

El sistema comete todo tipo de masacres contra las mujeres para mantenerse vivo. Los medios de comunicación no se hacen eco de ello y, en cambio, crean una percepción errónea en la sociedad. Matan los reflejos de la sociedad y normalizan lo que está sucediendo. Así es como este sistema patriarcal quiere crear un imperio del miedo. Me gustaría aprovechar esta oportunidad para señalar que, sobre todo, los hombres democráticos, revolucionarios y socialistas que están en contra del sistema tienen el mayor deber en este sentido. Un hombre que lucha contra este sistema debe, ante todo, alzar la voz contra él y corregir su propia actitud hacia las mujeres. Están sucediendo tantas cosas, se están desarrollando tantas cosas, pero no se dice nada al respecto. A excepción del movimiento por la libertad, todo el mundo guarda silencio como si fuera normal. Sin embargo, la cuestión más fundamental del socialismo debe ser la actitud hacia las mujeres.

Si no se defiende la libre convivencia, si no se defiende la libertad de la mujer, si no se acepta esto, ¿cómo puede llamarse socialista, demócrata o intelectual? El fascismo ya está haciendo lo suyo, el gobierno ya está actuando según su mentalidad, pero estamos hablando de otros grupos, hay una carencia aquí. Las personas a las que me refiero deberían leer a Rêber Apo. Aprovecho esta oportunidad para llamarles, especialmente a los jóvenes, a profundizar en la filosofía de Rêber Apo. Él dijo: «He matado la masculinidad en mí mismo». Incluso dijo que ningún hombre que no mate la masculinidad en sí mismo puede establecer la camaradería correcta con las mujeres y crear una familia democrática y una sociedad democrática. Rêber no dijo estas cosas sólo por decirlas. Afirmó que una sociedad debe crearse sobre esta base.

El 25 de noviembre debe ser un día de autocrítica para los hombres. Deben oponerse a esta violencia, deben generar odio contra esta masculinidad y rechazarla. Deberían corregirse con sus esposas, hijas y hermanas. Los hombres están en un estado de olvido aquí. Ponen toda la responsabilidad sobre los hombros de las mujeres y dicen que las mujeres deben cambiarlos. Por supuesto, como movimiento de liberación, nos consideramos responsables y tenemos ese deber. Como PAJK y KJK, brindamos educación; tenemos el deber de cambiar y transformar la sociedad. Pero los hombres también deben hacer esfuerzos. Las masacres, el acoso y la violación contra las mujeres destruyen los valores humanos. Como las mujeres son las defensoras de los valores humanos, los ataques contra las mujeres son ataques contra la vida. La fuerza de Rêber Apo surge aquí porque es un verdadero camarada con las mujeres; las entiende. Desde la fundación de nuestro movimiento hasta hoy, la lucha de género es fundamental para nosotros y nosotras. Si esta lucha no se libra a diario, no se puede lograr la libertad.

Una fuerte lucha de género crea verdaderos camaradas como los camaradas Rojger y Asya. Luchar por el género es luchar por la libertad. Se debe luchar de esta manera también en la sociedad. Nuestro movimiento tiene una historia de lucha de 50 años. Por ejemplo, en un lugar como Amed, la capital de la democracia, ¡las mujeres son masacradas! En Wan (tr. Van) y en Elih (tr. Batman) también. No hay un día en el sur del Kurdistán en que no haya mujeres masacradas. Por supuesto, esto no sólo ocurre en el Kurdistán; esto ocurre en todo el mundo, desde Norteamérica hasta África, desde América Latina hasta Europa. Según las estadísticas, la violencia contra las mujeres está más desarrollada en Europa y se vive sobre todo en el seno de la familia. Ya sabe, antes decían que eran el centro de la democracia, pero cuando miramos bien vemos que las mujeres no son libres. Las luchas de las mujeres deben volverse más socializadas.

Las integrantes de KJK y KCK deben empezar por ellas mismas y sus familias. Primero deben darse cuenta del paradigma de las mujeres libres desarrollado por Rêber Apo. Esto es lo correcto. No se puede simplemente participar en las protestas el 8 de marzo o el 25 de noviembre y ya está. No es así como funciona. Rêber Apo dijo que una mujer libre es más valiosa para él que un país. Luchamos sobre la base de esta filosofía. El 25 de noviembre, por supuesto, se deben organizar protestas masivas; la gente debe salir a las calles, pero deben basarse en cómo toda la sociedad, y en particular los hombres, deben vivir con las mujeres. Debe basarse en cómo ser un verdadero camarada, cómo ser un militante en la línea de la liberación de la mujer. En esto, los militantes del PKK y del PAJK son ejemplares. Por ejemplo, el camarada Rojger escribió en su carta que su acción es también una autocrítica de sus camaradas femeninas. ¿Qué es más valioso que eso? Se desgarra a sí mismo y sigue haciendo autocrítica. Aquellos que siguen los pasos de estos camaradas y dicen que trabajan en la creación de una sociedad libre sobre la base de esta idea-filosofía deben actuar de acuerdo con esta medida. ¿Cuál es la medida? Hay que acercarse conscientemente a la familia, a la esposa, a la hermana y a las compañeras femeninas. No deben dominar ni intimidar a las mujeres.

Hay muchos que se dicen demócratas, pero que constantemente se vuelven contra las mujeres y les dicen que deben saber cuál es su lugar. En cuanto una mujer comete un error, inmediatamente se produce una reacción dura, mientras que con un hombre se acepta simplemente. Así es el líder fascista Erdoğan con respecto a las mujeres. De la nada, se retiró de la Convención de Estambul, una ley que defiende los derechos de las mujeres al mínimo. Todos los días aparece en los medios de comunicación y les dice a las mujeres que deben tener tantos hijos y que deben vestir tal y tal. Amenaza a la sociedad todos los días. La lucha de las mujeres contra esto es muy importante. Pero, como dije, los grupos que mencioné también tienen deficiencias en este sentido.

Por ejemplo, saludo a los hombres de Kobane en este sentido. ¿Cuántos años llevan los hombres saliendo a la calle y participando activamente en las protestas allí el 25 de noviembre? Por supuesto, como dije, no debería ser solo el 25 de noviembre. Allí donde haya violencia, hay que fortalecer la lucha y no permitir que se produzca violencia. Cuando vean violencia contra las mujeres en la calle, cuando vean a alguien infligiendo violencia a su familia, deben intervenir y oponerse a quienes comercian inmoralmente con mujeres. Deben organizarse y tomar posición; eso es lo que significa valor y valentía. En este sentido, nadie debe hacerse el ciego, el sordo y el mudo. Creo que la sociedad puede basarse en la libertad de las mujeres, en la libertad de las mujeres y de los hombres.

Lo que hace al PKK tan invencible es el movimiento por la libertad de las mujeres; la esencia del PKK es el partido por la libertad de las mujeres. Rêber Apo dijo al principio que el PKK debe ser un partido de mujeres. El PKK es el partido de las mujeres, el partido de las Asyas, Rojgers, Rukens, Saras, Rojhats y Erdals. Mi llamamiento es a todas las mujeres, a todas aquellas que se oponen al sistema dominado por los hombres: deben participar fuerte y masivamente en las protestas del 25 de noviembre y dedicar cada día a esta lucha. Las mujeres deben fortalecer su autodefensa; no deben dejar a ninguna mujer desorganizada por ahí. Una mujer organizada es el mayor poder, y la defensa de las mujeres solo se puede lograr a través de la organización. Deben proporcionar todo lo que sea necesario para la organización; deben crear conciencia sobre la base de Jineoloji. Como movimiento de libertad luchamos sobre esta base, y nuestra lucha es por una sociedad libre, una nación democrática y un mundo democrático. Esto es lo más sagrado en el siglo en el que vivimos.

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