El lago de Van, el mayor lago de soda salina del mundo, es una maravilla natural con sus islas, bahías y playas. Todo esto lo convierte en un paraíso turístico. El salmonete perla, que sólo vive en este lago, es además la fuente de sustento de 30 mil personas.
El lago de Van, patrimonio de la humanidad, se está contaminando cada vez más rápido debido a los asentamientos de los alrededores. Las asociaciones medioambientales y los expertos naturales advierten que si la contaminación continúa así, el lago se convertirá en un pantano dentro de 20 años y todos los seres vivos que hay en él desaparecerán.
La Asociación Ambientalista de Van (ÇEV-DER) ha estado luchando durante años para evitar que el lago de Van desaparezca. El presidente de ÇEV-DER, Ali Kalçık, ha recordado que los kurdos llaman al lago ‘Behra Wanê (Mar de Van).
“El lago de Van tiene una superficie de 430 km. Hoy, las aguas residuales de una población de 1 millón 200 mil personas fluyen hacia el lago. Y es que el el tratamiento realizado ya no funciona. Unos 800 mil litros por segundo de residuos domésticos van al lago de Van. Por eso el lago está al borde de la muerte”.
Kalçık ha continuado: “Es una brutal masacre de la naturaleza. La gente ve el lago como un pozo de basura. Los residuos de dos provincias y 9 distritos terminan en el lago de Van”.
Kalçık ha declarado que, a pesar de la Ley de Protección de la Costa No. 3621, las instituciones estatales han ocupado la costa.