Julie Ward es una miembro británica del Parlamento Europeo para la región del noroeste de Inglaterra para el Partido Laborista. Fue elegida por primera vez en 2014 y reelegida en 2019.

Ward visitó a la diputada por Hakkari del HDP Leyla Guven durante su resistencia a la huelga de hambre, que exigía el fin del aislamiento del líder del pueblo kurdo Abdullah Ocalan.

Ward ha estado en Turquía y Kurdistán del Norte varias veces y también en Rojava.

En la primera parte de esta entrevistas, Ward habló con la ANF sobre la reciente decisión del AKP de nombrar a los administradores de los municipios de Amed, Van y Mardin y explicó la situación que ha presenciado en sus recientes viajes al Kurdistán del Norte y Rojava.

¿Cómo evalúa la decisión de Erdogan de nombrar administradores para 3 municipios governado legítimamente por el HDP, y cuánto podría tolerar Europa en aras de que Turquía detenga a los migrantes?

Creo que Erdogan se ha asustado por el giro de los acontecimientos en Estambul. El AKP que pierde ante la oposición del CHP en la ciudad más grande y cosmopolita de Turquía es un duro golpe, por lo que el presidente está recurriendo a tácticas de intimidación en las ciudades de mayoría kurda, donde ya ha sentado un precedente para derrocar la democracia con su política de 'fideicomisarios no electos'. Además de la eliminación de los alcaldes del HDP recientemente elegidos en Diyarbakir, Mardin y Van, el estado también detuvo a más de 400 miembros y empleados del consejo municipal. Algunas de estas personas perderán su sustento económico y les será difícil llegar a fin de mes. Cuando visité Diyarbakir por primera vez en 2016, conocí a docenas de maestros de escuela que habían sido destituidos de sus puestos con los decretos del estado de emergencia, y había una gran ansiedad por su capacidad para obtener un empleo alternativo.

Las tácticas de miedo son el recurso de un líder débil. Erdogan es un acosador que no puede prosperar o sobrevivir en una democracia saludable, por lo que recurre a socavar la democracia. Me alegra que mi grupo político en el Parlamento Europeo, los socialistas y los demócratas, hayan hecho una fuerte declaración en apoyo de los derechos fundamentales del pueblo kurdo.

La Comisión Europea también hizo una fuerte declaración pidiendo a Turquía que derogue las medidas que inhiben el funcionamiento de la democracia local, en línea con las recomendaciones de la Comisión de Venecia y con el compromiso de Turquía con la Carta Europea de Autonomía Local.

Mientras tanto, estoy presentando una pregunta a la Comisión con respecto a este tema, pidiendo a la Unión Europea que envíe una misión de investigación a la región y un proceso de paz inclusivo renovado, como propone Abdullah Öcalan.

Has estado en Kurdistán del Norte muchas veces. ¿Puede decirnos cómo está la situación ahora, después de las elecciones?

En todos los años que llevo visitando Kurdistán desde que fui elegida en 2014, siempre he encontrado que la situación es tensa y exige una lucha constante, una gran energía y fortaleza.

El AKP coloca nuevos obstáculos en cada giro, atacando la democracia, pero siempre me sorprende la fuerza y ​​la determinación de los miembros del HDP con los que me encuentro y los activistas kurdos, especialmente las mujeres.

Fui a Igdir para ayudar con la observación electoral en junio de 2018 y fui testigo de prácticas injustas. A pesar de eso el HDP alcanzó el umbral necesario en todo el país y hubo una gran alegría.

Las recientes elecciones a la alcaldía en Estambul han demostrado que el reinado de Erdogan está llegando a su fin. Es esta creciente amenaza para la base de poder del AKP lo que ha provocado aún más ataques contra las comunidades kurdas.

Creo que debemos prepararnos para un ataque contra todas las instituciones kurdas y especialmente contra los funcionarios electos en los próximos años, en el período previo a las elecciones de 2023. Pero, la comunidad internacional es mucho más consciente y más crítica que antes y espero que haya más solidaridad.

Sin duda, usted es una de las eurodiputadas más activas en plantear inquietudes y la cuestión kurda en el Parlamento Europeo. ¿Qué crees que Europa debería y podría hacer?

Me gustaría ver que se elimine el PKK de la lista de terroristas y que se realicen más esfuerzos para traer a las diferentes partes interesadas a la mesa. La UE puede ser un eficaz agente de paz. Me gustaría ver que Turquía vuelva a los programas de financiación de la UE que apoyan la cultura y fortalecen la sociedad civil.

Ninguna de mis visitas a las áreas kurdas han sido misiones oficiales, sin embargo, he aprendido mucho; sería bueno intentar conseguir más misiones oficiales para visitar y hacer algunas de las cosas que he hecho. El acuerdo de refugiados ha sido un desastre y Europa necesita reconocer que este fue un mal plan con un alto precio, tanto en términos de limitar nuestra capacidad de criticar a Erdogan como desde una perspectiva humanitaria.

Pero la mejor acción sería una iniciativa del Comité de Asuntos Exteriores (AFET) vinculada al trabajo de Kati Piri como relatora permanente del Parlamento Europeo y sus llamados a que se devuelva la democracia total a Turquía.

Has estado en Rojava. ¿Cuáles son las cosas que más te impresionaron en términos de autogobierno, mujeres, educación...

En Rojava, me impresionaron mucho las mujeres y la forma en que están reconstruyendo la sociedad, a través de los diferentes niveles de toma de decisiones democráticas.

Conocí a una mujer en Kobane que participaba en un programa de educación política por primera vez en su vida y se podía ver que fue una experiencia muy enriquecedora: literalmente irradiaba energía positiva. Visitar el pueblo de mujeres que se estaba construyendo también fue una experiencia memorable.

La educación en el sentido más amplio es un concepto clave para las personas de la región, tanto a través de la educación formal como informal. Visitamos un centro cultural donde los niños se divertían haciendo títeres y aprendiendo música de músicos kurdos. También me complació saber sobre el establecimiento de una nueva universidad en Qamishlo que no solo enseña medicina, ingeniería, ciencias, bellas artes y humanidades, sino también jineologi: feminismo o ciencia de la mujer.

Recientemente ha habido un Foro sobre el ISIS en Rojava. ¿Cómo cree que debería abordarse el tema de los miembros extranjeros del ISIS y sus familias? ¿Está Europa lidiando con este delicado tema de la manera correcta?

Aunque estoy de acuerdo en que los miembros del ISIS que perpetraron violencia y atrocidades deberían estar sujetos a un juicio justo, sigo preocupada por las familias de los combatientes del ISIS, especialmente las mujeres y los niños, con muchos niños inocentes que nacen y nacieron durante el conflicto cuyo futuro es incierto.

También me preocupan los ciudadanos vulnerables de la UE que se radicalizaron y los miembros de su familia que generalmente ignoraban lo que estaba sucediendo y sienten el dolor del alejamiento. La UE ha establecido una Red de Concienciación Radical que ha reunido a las familias de las víctimas, padres de jóvenes radicalizados, personas que habían sido radicalizadas y lograron escapar y reintegrarse, y académicos y expertos en seguridad.

Si bien algunos Estados miembros de la UE están adoptando una línea dura sobre el regreso de los combatientes del ISIS, creo que esto no resolverá el problema, especialmente porque los miembros de la Brigada Internacional YPG / YPJ podrían estar sujetos a las mismas reglas.

Necesitamos construir sobre el excelente trabajo que RAN está haciendo en Europa y desarrollar un modelo para los campos de detención en Siria. Creo que debería haber una mejor adhesión de las YPG / YPJ con respecto a la campaña internacional para poner fin al uso de niños soldados.