La Co-presidencia del Consejo Ejecutivo de la Confederación de los Pueblos del Kurdistán (KCK) ha emitido una declaración para conmemorar a las víctimas de la llamada «Masacre de la estación de tren de Ankara».

El 10 de octubre de 2015, la gente se reunía para la «Concentración por el Trabajo, la Paz y la Democracia» en la estación de tren de Ankara, cuando tuvo lugar la brutal masacre.

La KCK ha declarado: «Hoy condenamos una vez más esta masacre inhumana, brutal y despreciable, que atentó contra la democratización de Turquía y el proceso de una solución democrática de la cuestión kurda. Esta masacre ha pasado a la historia de Turquía como el mayor asesinato en masa. Honramos a quienes perdieron la vida en ella, conmemoramos a todos los mártires de la revolución y la democracia con respeto y gratitud, y les reiteramos nuestra promesa.

Expresamos nuestro saludo y respeto a los queridos familiares de los que perdieron la vida y a los que resultaron heridos. Es nuestra responsabilidad histórica más fundamental ampliar el govend –baile tradicional kurdo actualmente perseguido por el régimen de Ankara– de paz, libertad y fraternidad trazado por las decenas de miles de personas que tomaron las plazas aquel día y hacer realidad el ideal de una vida libre de los pueblos. Con la lucha común unida de los pueblos, este ideal seguramente se realizará y cobrará vida».

La KCK añade: «La masacre de la estación de tren de Ankara es el mayor de una serie de ataques llevados a cabo por el régimen del AKP-MHP bajo el disfraz del ISIS. Al igual que otras masacres anteriores, el ataque en Ankara se dirigió contra el proceso de democratización de Turquía y la solución democrática de la cuestión kurda, la unidad de los pueblos y el deseo de una vida igualitaria y común. Las ideas y los métodos de solución desarrollados por Rêber Apo [Abdullah Ocalan] han fortalecido las fuerzas socialistas, democráticas y libertarias, y han creado las bases para la democratización de Turquía y la solución democrática de la cuestión kurda, en particular mediante el desarrollo de una alianza democrática entre el pueblo kurdo y los pueblos de Turquía. Sin embargo, el gobierno del AKP-MHP, que tiene una mentalidad fascista, racista, reaccionaria, genocida y expansionista, con el fin de impedir este camino hacia la democratización de Turquía y Oriente Medio, ha puesto en marcha el concepto genocida que había preparado de antemano –el llamado 'çöktürme planı'–.»

El KCK sigue: «La masacre de la estación de tren de Ankara tuvo lugar sobre la base de este concepto genocida. La alianza del gobierno del AKP-MHP con el ISIS también estaba dentro de este ámbito

En los ataques y masacres llevados a cabo en Turquía, Kurdistán y muchas partes de Oriente Medio, el gobierno del AKP-MHP utilizó al ISIS y a las estructuras afines al ISIS como fuerzas de ataque. Con esto, el gobierno del AKP-MHP pretendía hacer realidad su sueño neo-otomano reaccionario, expansionista y genocida. Sin embargo, debido a la derrota del ISIS contra la lucha democrática unida de los pueblos, este plan del gobierno del AKP-MHP no funcionó y fracasó. La derrota del gobierno del AKP-MHP y la profunda crisis en la que ha entrado es el resultado de esta situación.

Las reacciones del jefe fascista Tayyip Erdoğan y del gobierno AKP-MHP a los acontecimientos en el Oriente Medio y las percepciones que quieren crear están estrechamente vinculadas a esta situación. Tras fracasar en la consecución de sus objetivos expansionistas neo-otomanos con el plan del ISIS y fracasar en su intento de convertirse en la potencia dominante en Oriente Medio, ha adoptado una actitud que profundiza los problemas entre Israel, Irán, los pueblos árabes y otros Estados y pueblos de Oriente Medio, provocando y extendiendo la guerra. Con la profundización y propagación de la guerra en Oriente Medio, intenta alcanzar los objetivos hegemónicos y expansionistas que no pudo lograr. Como trata de proyectar, no está ni contra el genocidio de los pueblos ni contra las masacres cometidas por Israel. La masacre de la estación de tren del 10 de octubre y las masacres llevadas a cabo por el gobierno del AKP-MHP, así como su política de guerra, genocidio y aislamiento que lleva a cabo, demuestran claramente esta realidad.

A la vez que condenamos una vez más esta despreciable masacre en su noveno aniversario, afirmamos que pediremos cuentas históricas de todas las masacres y asesinatos en masa, y que los responsables de las masacres serán llevados ante la justicia. Sobre esta base, llamamos a todos los pueblos, a todas las fuerzas democráticas, socialistas y libertarias, a reforzar su unidad sobre la base de una estrategia de lucha común unida y a seguir intensificando la lucha.»