Sozdar Dêrik, miembro del Comando General de las YPJ (Unidades de Defensa de las Mujeres) y de las SDF (Fuerzas Democráticas Sirias), habló con ANF con motivo del 12º aniversario de la Revolución de Rojava del 19 de julio.

Sozdar Dêrik afirmó que los pueblos, las mujeres y las fuerzas revolucionarias han llegado hasta aquí con su lucha y su trabajo y han adquirido la voluntad de gobernarse a sí mismos: “En los próximos períodos o años podemos ser objeto de nuevos ataques. Debemos aprovechar cada momento al máximo. Debemos defender los valores de la revolución, tanto jóvenes como viejos”.

Sozdar Dêrik comenzó su discurso felicitando al líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan, a los mártires de la revolución, a los compañeros de lucha, al pueblo y a todas las madres por la Revolución del 19 de julio y destacó la importancia de julio para ellos. Dêrik agregó: “El hecho de que la Revolución de Rojava haya tenido lugar en este mes, y que julio sea el mes de gran resistencia en la historia de la lucha por la libertad, por supuesto que lo hace mucho más significativo. También celebramos la cuarta conferencia de las YPJ en este mes”.

Sozdar Dêrik, recordando que la Revolución del 19 de julio se llevó a cabo con el trabajo y la resistencia de las mujeres, afirmó lo siguiente: "Una revolución hecha por mujeres nunca pierde. Una mujer es la madre de la sociedad, también es quien encarna todos los valores de la sociedad y da existencia a la misma. En este sentido, constituye la representación de la sociedad. La Revolución del 19 de julio comenzó en Kobanê con el grito de libertad de la camarada Jînda. La revolución liderada por mujeres tiene un significado muy valioso. Se trata de reivindicar la propia existencia. Vivir en una revolución así durante años requiere mucho trabajo, sacrificio y resistencia.

El proceso revolucionario, la lucha y la guerra continuaron sin detenerse ni un momento. Nuestro pueblo también participó en este proceso de revolución y lucha de la mejor manera. Por supuesto, todavía hay dificultades y deficiencias. Ninguna revolución ha tenido lugar sin costo y dolor. Si buscamos lo que es cómodo, nos estamos engañando a nosotros mismos. Los ataques contra la revolución continúan, al igual que la determinación de resistir y luchar contra ella como el primer día. Como pueblo y sociedad, no podemos decir que todo esté terminado. Sin embargo, sabemos muy bien que podemos superar todas las dificultades experimentadas. Hemos luchado contra organizaciones de pandillas como el ISIS y al-Nusra, que atacan los valores de toda la humanidad y quieren destruir las sociedades. Querían condenar a todo el mundo a la oscuridad. Cuando la gente vio sus banderas, huyó. Solo sus nombres fueron suficientes para infundir miedo en la gente. Luchamos contra tal oscuridad y realidad bárbara. Por eso, no somos un pueblo que pueda escapar de tales dificultades y realidad.

En estas tierras se vivió la línea más correcta, la lucha más correcta, la mayor resistencia en Oriente Medio. No subestimamos la lucha de otros pueblos en Oriente Medio. Actualmente, muchos pueblos que viven en Oriente Medio siguen sufriendo mucho, están sometidos a una gran injusticia y opresión. También están luchando. Sin embargo, debe quedar claro que una revolución con una organización fuerte y una estrategia populista no puede ser derrotada. Hemos llegado hasta este día con el trabajo y la lucha de nuestro pueblo. Tenemos la voluntad de gobernarnos a nosotros mismos. Tenemos que proteger esto.

La única estrategia de las fuerzas que se oponen a nosotros hoy en día es la de liquidar esta revolución. La ven como su enemiga. Sin embargo, no hemos declarado a nadie como enemigo, hemos defendido nuestros valores, nuestra voluntad y nuestras tierras. Nuestra lucha continuará de la misma manera a partir de ahora. Pero no permaneceremos callados ante cualquier ataque dirigido contra nosotros. Hasta ahora hemos confiado en nuestras propias fuerzas, lo que demuestra que nuestra revolución ha avanzado con éxito hasta hoy.

Si analizamos los ejemplos del mundo, vemos que, sobre todo en el caso de Afganistán, quienes no confían en sus propias fuerzas y no pueden crear en sí mismos el poder de la solución pierden. Como la administración, el mando militar y la voluntad de ese pueblo no pudieron mostrar la fuerza y ​​la voluntad de organizarse y convertirse en una potencia, tuvieron que retroceder cien años. Para que no nos enfrentemos a semejante final, para que nuestros pueblos no vuelvan a enfrentarse a ataques contra su voluntad, su idioma, su cultura y sus valores, debemos abrazar la revolución por todos los medios. Por supuesto, esto se puede lograr mediante la lucha, la resistencia y la confianza en las propias fuerzas.

Damos la bienvenida al mes de julio con entusiasmo, orgullo y celebración. Especialmente como fuerza militar, damos la bienvenida con orgullo al mes de julio como un gran símbolo de la resistencia que marcha hacia la libertad y la victoria. Es un honor para nosotros compartir los valores y los logros creados con el pueblo. Sobre esta base, como fuerza militar, nos comprometemos a proteger estos valores. Es posible que seamos objeto de nuevos ataques en los próximos períodos o años.

En este sentido, debemos aprovechar cada momento al máximo. Debemos organizarnos y prepararnos como si fuera a producirse un ataque ahora. Todos, jóvenes y viejos, deben prepararse para defender los valores de la revolución. Debemos celebrar nuestra revolución con este espíritu. Sin embargo, si no tenemos una organización fuerte, los ataques contra nosotros pueden desmoralizarnos. Se está librando una gran guerra especial contra nosotros. Por un lado, el propio Erdogan corre de aquí para allá, por otro lado, envía a su ministro de Asuntos Exteriores a todas partes y quiere mantener conversaciones con muchos países.

Todos estos esfuerzos tienen como objetivo liquidar la revolución popular, los valores y los logros de la revolución. No lo permitiremos. Por supuesto, no lo decimos sólo por nuestro propio pueblo. Estamos en contra de cualquier política que se dirija contra todas las sociedades y pueblos. No somos parte de la ocupación del territorio de ningún país; estamos en contra de ella. En este sentido, se librará la lucha necesaria para la protección de todo el mundo, de los pueblos, de Oriente Medio y de Siria. Para eso existimos. Somos el resultado de la lucha y la resistencia de todos los pueblos, de las mujeres, de las fuerzas revolucionarias. Somos conscientes de ello y libraremos una lucha enérgica por ello. Sobre esta base, felicitamos a todo nuestro pueblo y al pueblo sirio por la Revolución del 19 de julio. Protegeremos a nuestro pueblo con revoluciones más fuertes y más grandes en los próximos procesos”.