Entrevista al académico kurdo Serhat Tutkal sobre el riesgo de que los pueblos del norte y este de Siria sufran un genocidio a manos de milicias islamistas sirias y del ejército turco.
El académico kurdo Serhat Tutkal dice que los pueblos del norte y el este de Siria corren el riego de sufrir un genocidio. La realidad desatada desde que el Ejército Nacional Sirio (ENS) y Turquía lanzaron una operación militar masiva contra Rojava (Kurdistán sirio) y la Administración Autónoma Democrática del noreste sirio (AADNES) confirma los temores de Tutkal.
Magíster en Ciencias Políticas por la Universidad de Ankara (Turquía) y Doctor en Ciencias Humanas y Sociales por la Universidad Nacional de Colombia, Tutkal centra sus investigaciones en la violencia política y los discursos relacionados en América Latina y Medio Oriente.
Para el académico (como para buena parte del pueblo kurdo), el derrumbe del régimen de Bashar Al Asad se convirtió en una contradicción donde confluyeron la alegría y el temor por el futuro. Los kurdos de Siria, antes de declarar la autonomía de su territorio originario en 2012, eran negados, perseguidos, encarcelados y asesinados por el régimen y el Estado. Sin posibilidades de hablar en libertad su lengua materna y convertidos en ciudadanos de tercera categoría, la denominada «Primavera árabe» les permitió abrir una brecha en el caos del país y no solo levantarse en armas, sino iniciar un camino (plagado de dificultades) de creación de una nueva institucionalidad social y administrativa, teniendo como norte la liberación de las mujeres, la organización comunal, la defensa de los derechos de los demás pueblos que habitan Rojava (ya sean árabes, asirios, armenios, etc.) y la convivencia interreligiosa. En medio de todo esto, la guerra interna en Siria y el combate de sus fuerzas de autodefensa contra el Estado Islámico (ISIS) —al que derrotaron en marzo de 2019— y el ENS, que entre 2018 y 2019 ocupó ilegalmente varias zonas del norte de Siria con el respaldo abierto de Turquía.
Ahora que Siria corre el peligro de terminar despedazada entre los intereses de sus nuevos conquistadores de Hay’at Tahrir al-Sham (HTS), el ENS, Turquía, Israel y Estados Unidos, Tutkal asegura en esta entrevista que los pueblos del noreste del país, encabezados por los kurdos, tienen desafíos profundos por delante: desde resistir los intentos de Ankara por derrotar la experiencia de la AADNES, pasando por la defensa de las regiones que el ENS intenta ocupar, hasta la consolicación de un proyecto basado en el confederalismo democrático, el paradigma sintetizado por el líder kurdo Abdullah Öcalan, encarcelado desde 1999 en la isla-prisión de Imrali, en Turquía.
Serhat Tutkal.
LA
¿Cuáles son las principales razones de la caída del régimen de Bashar al Asad?
ST
Aunque la razón principal de la caída es la impopularidad del régimen antidemocrático de Asad, no debemos pasar por alto el hecho de que el régimen fue capaz de reproducir estas prácticas violentas mientras lograba sobrevivir durante décadas. Las razones de su caída en este momento concreto están vinculadas a la política interestatal y a los recientes acontecimientos en Asia Occidental. Los principales acontecimientos a mencionar serían el debilitamiento del Hezbolá libanés por los ataques israelíes, la disminución de la influencia de Irán como resultado de su conflicto con Israel y la dificultad de Rusia para apoyar al régimen de Asad debido a la prolongada guerra en Ucrania. También es importante que el Estado turco logró controlar ciertas partes de Siria durante los últimos años, que se utilizaron para apoyar y entrenar a la oposición islamista, lo que hizo posible la toma de Damasco.
LA
¿Cómo analiza los desafíos que enfrentan los pueblos del norte y el este de Siria?
ST
Desafortunadamente, enfrenta muchos desafíos en estos días. Creo que lo primero que hay que mencionar es que los ataques dirigidos contra varias regiones de la AADNES provocaron desplazamientos masivos, con cientos de miles de personas obligadas a huir de Shehba, Manbij y Deir ez-Zor. Esto significa que hay muchas y muchos refugiados que necesitan alimentos, alojamiento y servicios sanitarios, entre otras necesidades básicas. Es poco probable que la Administración Autónoma esté en condiciones de satisfacer adecuadamente estas necesidades, sobre todo teniendo en cuenta las duras condiciones invernales de la región, donde la temperatura llega a estar bajo cero en estas épocas. Además, muchas de estas personas ya han sufrido desplazamientos durante la guerra civil siria, lo que significa que se verán aún más traumatizadas y revictimizadas. Si añadimos esto a la situación especialmente vulnerable de las y los niños, ancianos y personas que necesitan atención médica, se puede ver que la situación creó una crisis en Rojava.
Otra cuestión importante es el riesgo de resurgimiento del Estado Islámico. Dado que las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) están ocupadas con los enfrentamientos en curso con las milicias islamistas respaldadas por Turquía, la lucha contra el Estado Islámico se ha detenido obligatoriamente. Ya hay una serie de imágenes que muestran la bandera del Estado Islámico abiertamente desplegada en diferentes regiones. Además, miles de combatientes del Estado Islámico son prisioneros en zonas controladas por la Administración Autónoma. Muchos de estos prisioneros son ciudadanos de países occidentales, pero las y los kurdos han tenido que hacerse cargo de ellos porque sus países de origen europeos se niegan a aceptar su regreso. Existe el riesgo de que estos combatientes se liberen en medio de los combates en curso.
Por último, está el riesgo en el que no queremos ni pensar. Si la Administración Autónoma cae como consecuencia de estos ataques procedentes de múltiples frentes, eso conduciría con toda seguridad a un genocidio y a la pérdida de uno de los intentos vanguardistas de establecer una democracia de base y una forma alternativa de organización político-administrativa que pueda, a largo plazo, sustituir a la institución colonialista del Estado-nación. La falta de reconocimiento internacional de la Administración Autónoma está poniendo al pueblo kurdo en peligro de enfrentarse a otro genocidio.
LA
¿Qué papel juega Turquía en lo que sucede en Siria?
ST
Turquía estuvo implicada en la guerra civil siria desde su inicio. Actualmente, apoya a las milicias islamistas del Ejército Nacional Sirio en sus ataques contra la Administración Autónoma y también lleva a cabo directamente ataques con drones en Kobane y Raqqa. Parece que el actual gobierno turco pretende controlar un amplio territorio en Siria a través de las milicias islamistas y destruir la organización política de la Administración Autónoma. También hay que recordar que Turquía tiene intereses económicos en Siria y las empresas turcas cercanas al gobierno esperan reconstruir las ciudades destruidas y explotar los recursos naturales, beneficiándose así enormemente de la guerra y la destrucción. Por último, el gobierno supremacista suní de Turquía espera disminuir la autoridad de los gobiernos musulmanes no suníes, entre los que se incluye el anterior gobierno sirio y también el actual gobierno iraní. El control de Siria por un grupo radical suní como Hay’at Tahrir al-Sham les permite impulsar sus políticas en la región.
LA
La Administración Autónoma del Noreste sirio dijo que estaba dispuesta a entablar un diálogo abierto con Hay’at Tahrir al-Sham. ¿Cree posible que esto suceda?
ST
Hay’at Tahrir al-Sham es un grupo islamista radical cuyos dirigentes son, en su mayoría, antiguos militantes de Al Qaeda. Esto demuestra obviamente que tienen poco en común con la postura ideológica de la Administración Autónoma y su organización multiétnica, multirreligiosa y democrática que prioriza la libertad de las mujeres. Dicho esto, creo que ese diálogo sigue siendo posible por razones pragmáticas. Hay’at Tahrir al-Sham necesitaba hasta ahora el apoyo del Estado turco, pero tras formar gobierno y establecer su autoridad es probable que prefiera cada vez menos la intervención de Turquía. La presencia de tropas turcas y de milicias dirigidas por Turquía en su territorio no será preferida por Hay’at Tahrir al-Sham. Dado que es improbable que Hay’at Tahrir al-Sham venza a la Administración Autónoma en términos militares, necesitaría la ayuda del Estado turco para establecer el control sobre el norte y el este de Siria. Sin embargo, en ese hipotético escenario, es poco probable que el Estado turco ceda el control de la región tras la caída de la Administración Autónoma. Esto me hace pensar que Hay’at Tahrir al-Sham puede preferir la supervivencia de la Administración Autónoma a una mayor expansión turca. Entonces, parece probable que quieran utilizar Rojava como zona tampón entre el Estado turco y el nuevo gobierno sirio, de forma muy parecida a otros casos históricos en los que los centros políticos utilizaron territorios poblados por kurdos como zonas tampón entre unos y otros.
LA
¿Quiénes piensa que son los actores que perdieron con la caída del régimen sirio y quiénes salieron fortalecidos?
ST
La caída del régimen de Asad debe considerarse una victoria para todos los actores democráticos de Asia Occidental, aunque la situación actual de Siria no permita mucho optimismo. Es probable que la caída de un régimen autoritario hereditario contribuya a la democratización de la región a largo plazo. Sin embargo, a corto plazo, este cambio implica una disminución de la influencia rusa e iraní en la región y un aumento de la influencia israelí y turca.
LA
Lo que ocurre en Siria, ¿significa un cambio estructural y profundo para todo Medio Oriente?
ST
Esto depende de lo que ocurra con Rojava. Si se concede a la AADNES la autonomía oficial y el reconocimiento internacional, esto influiría enormemente en la región y sería un ejemplo a seguir para muchos pueblos. De este modo, el autogobierno basado en el confederalismo democrático puede florecer, permitiendo un nivel sin precedentes de gobierno democrático, participación popular, igualdad de género y descolonización en la región. La Administración Autónoma también sería un ejemplo a seguir en términos de coexistencia multiétnica y multirreligiosa. No creo que el cambio en el equilibrio de poder entre los Estados dominantes suponga un cambio radical en la región, pero si Rojava consigue asegurar su supervivencia puede introducir una forma diferente de organización político-administrativa a otros pueblos de la región, llevando así a un cuestionamiento generalizado del Estado-nación como institución impuesta por el colonialismo europeo y el capitalismo como modo de producción y distribución económica.
Fuente: Por Leandro Albani para jacobinlat.com - Imágen de portada: Tropas estadounidenses y turcas realizando operaciones conjuntas en el noreste de Siria, el 4 de octubre de 2019. (Vía Wikimedia Commons)
