YPJ expresa su solidaridad con los manifestantes en la India

Las Unidades de Defensa de la Mujer del Norte y el Este de Siria expresaron su solidaridad con las protestas en India.

JIN, JIYAN, AZADI

Desde la violación y asesinato de una joven doctora el 9 de agosto en Calcuta (este de India), el país está conmocionado. Cientos de miles de personas recorren desde hace días las ciudades indias con marchas a la luz de las velas bajo el lema «Recuperemos la noche» para protestar contra la falta de seguridad para las mujeres y exigir penas más severas para los actos de violencia.

También se grita el lema kurdo «Jin Jiyan Azadî» (Mujer, vida, libertad). Durante el fin de semana, más de un millón de doctoras y doctores de toda India iniciaron una huelga general. Las trabajadoras y trabajadores de los hospitales siguen en huelga en varias regiones. Además de que se castigue a los autores, las y los manifestantes también reclaman más seguridad en los hospitales.

Solidaridad de las YPJ

La Comandancia General de las Unidades de Defensa de la Mujer (YPJ) manifestó en un comunicado: «Tal vez ésta sea la interfaz entre la cultura extrema de violencia y abusos y una nueva y necesaria cultura de cambio social para proteger realmente a las mujeres en todos los ámbitos de la vida. También en la India la lucha de las mujeres por la libertad, la igualdad y una vida digna es cada vez mayor y más fuerte. Pero paralelamente a esta búsqueda, el sistema de dominación patriarcal y capitalista está intensificando sus ataques contra las mujeres».

La declaración añade: «Este sistema intenta defender su soberanía mediante la violencia, la violación, el feminicidio y el genocidio. Como YPJ, condenamos la violación-asesinato de la joven doctora y hacemos un llamamiento a todas las organizaciones y movimientos de mujeres para que alcen su voz contra todas las formas de opresión, violencia, abuso, presión física y psicológica contra las mujeres. Los asesinos y violadores deben rendir cuentas. Esto es necesario en todas partes del mundo, ya que la cultura abusiva del sistema patriarcal es una epidemia global con un pasado muy antiguo. Hoy en día, las mujeres siguen sufriendo acoso en la India, los revolucionarios son ahorcados en Irán y el matrimonio de niñas es legal en Irak. En Afganistán, a las mujeres se les niegan todos los derechos humanos. Por tanto, la lucha contra este sistema debe ser global, multilateral e invencible».

El cambio social viene de la sociedad

Toda la sociedad debe reconocer esta realidad y alzarse con una sola voz contra los atentados, afirmaron las YPJ, añadiendo: «Cuanto mejor organizada esté una sociedad, más podrá desarrollar su poder de autodefensa. Por supuesto, las mujeres tienen que protegerse más que nadie. Esto también es posible mediante la organización. Una mujer organizada es una mujer que puede defenderse a sí misma, a todas las mujeres y a la sociedad. Las mujeres tenemos que protegernos más entre nosotras, tenemos que estar juntas, tenemos que apoyarnos.

En este sentido, la ira de las mujeres y el pueblo de la India nos parece muy admirable e inspiradora. Si este levantamiento se convierte en una organización fuerte, acabará con este sistema de poder opresivo.»

Lucha contra el ISIS

Las YPJ continuaron: «Hemos librado una lucha implacable contra el sistema patriarcal que llevó a cabo la ocupación, el genocidio, el acoso y el saqueo en nuestras regiones en forma de ISIS y otros grupos. Bajo el ISIS, las mujeres fueron brutalmente maltratadas, vendidas como esclavas en los mercados y privadas de todos sus derechos. La gran tragedia que han vivido las mujeres yazidíes está grabada en la memoria de toda la humanidad. Luchamos, resistimos y derrotamos a estas bandas con valentía, fe y una fuerte organización. Libramos una gran batalla para salvar a las mujeres yazidíes, cristianas, kurdas y árabes de la brutalidad del ISIS.

Estas mujeres, nuestras combatientes y comandantes, están hoy en el punto de mira de las máquinas asesinas voladoras del Estado turco. En las zonas del norte y el este de Siria ocupadas por Turquía y sus socios, soldados y mercenarios practican un régimen que se alimenta de violaciones, secuestros y masacres de mujeres. Estamos librando una lucha polifacética contra esta brutalidad que refuerza nuestro poder de defensa. No cabe duda de que la filosofía de Jin Jiyan Azadî, que nos transmitió a las mujeres Rêber Apo -Abdullah Öcalan- tras una larga y costosa resistencia, nos muestra el camino para liberarnos de una concepción masculina que se basa en la opresión y en la cultura de la violación.

Como YPJ, hemos tomado esta filosofía como base de nuestra lucha por la liberación de la mujer. Con el tiempo, esta filosofía creció: se convirtió en el llamamiento de la revolución tras la muerte de Jina Mahsa Amini y tuvo eco en otros levantamientos de mujeres, incluso en la India. «Jin Jiyan Azadî» es la prueba de que la revolución de las mujeres se está globalizando. Ahora es el momento de construir el Confederalismo Mundial de Mujeres.

En este sentido, apreciamos la valiosa resistencia de las mujeres indias y expresamos nuestra plena solidaridad con ellas. Llamamos a las mujeres indias y a todas las mujeres del mundo a no rendirse en su lucha, a formar su organización sobre la base del paradigma de «Jin Jiyan Azadî» y a construir su autodefensa.»

El sistema de dominación patriarcal y capitalista intensifica sus ataques contra las mujeres

El asesinato de la doctora en prácticas de 31 años tuvo lugar en un hospital. Al principio, la administración dijo que se había suicidado, pero ahora las pruebas parecen claras. Todavía no se ha publicado el informe definitivo, pero la policía supone que la joven fue víctima de una violación en grupo antes de ser asesinada. A partir de este martes, el Tribunal Supremo de Delhi se ocupará del crimen.

El caso de la doctora recuerda al de la violación en grupo en un autobús en Delhi en 2012, en la que una joven de 23 años sufrió tantos abusos que murió a causa de las heridas.