Un total de 125 miembros de la confederación tribal al-Akidat se han unido a las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) en una ceremonia oficial el martes. Con su participación, los combatientes envían una clara señal contra los intentos de desestabilizar a las tribus mediante el asesinato y la antipropaganda contra la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria.

Los combatientes seguirán un curso de formación que durará hasta 45 días, durante los cuales recibirán diversas lecciones intelectuales, políticas y militares, así como entrenamiento en diversos tipos de armas.

Uno de los voluntarios es Ali al-Dzhalud que dice que decidió unirse a las SDF después de los ataques a la tribu. Otros reclutas citaron motivos similares y subrayaron que se habían unido a las SDF para defender la seguridad y los logros en la región.

En las últimas semanas y meses, miembros destacados de la confederación tribal al-Akidat han sido asesinados repetidamente en la región de Deir ez-Zor. Los autores trataron de presentar los ataques como actos de la Administración Autónoma y, por lo tanto, de poner a la tribu en su contra. Las investigaciones y las confesiones de los detenidos revelaron que el régimen sirio estaba detrás de los ataques. Las células durmientes apoyadas por Turquía también persiguen un objetivo similar.