Según una declaración escrita emitida por las Fuerzas de Seguridad Interna en el norte y este de Siria, un vehículo aéreo de combate no tripulado (UCAV) del Estado turco atacó el lunes un vehículo perteneciente a la Seguridad Interna en Kobanê.

Las Fuerzas de Seguridad Interior declararon que dos de sus miembros resultaron heridos como consecuencia del ataque.

"Este ataque a nuestras fuerzas es un mensaje claro que demuestra la aspiración del Estado turco de impedir que nuestras fuerzas cumplan con sus deberes antes de las elecciones municipales", decía el comunicado.

La declaración señaló que “el ataque también allana el camino para que los grupos y los delincuentes perturben la seguridad y la estabilidad de nuestras regiones. Este ataque aumenta nuestra determinación y resolución de trabajar más duro que nunca para mantener una sociedad segura y estable”.

Turquía lleva años atacando con drones a la población civil, la Administración Autónoma y las organizaciones militares afiliadas a las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) en la región autónoma del norte y el este de Siria. El espacio aéreo sobre Siria está controlado por Estados Unidos y Rusia. La comunidad internacional está ignorando el terror con drones, que comenzó en junio de 2020 con el asesinato de tres representantes de la organización coordinadora de mujeres Kongra Star, en Kobanê. Según datos del Centro de Información de Rojava y la Administración Autónoma, Turquía ya ha llevado a cabo más de cien ataques con aviones no tripulados en la región este año. Al menos 28 personas han muerto y otras 44 han resultado heridas. Más recientemente, cuatro miembros de las SDF murieron en ataques con aviones no tripulados y otras once personas resultaron heridas el viernes pasado.