En el juicio por el asesinato de Narin Güran, tres sospechosos, incluida la madre de la niña, han sido condenados a cadena perpetua.

La madre de la niña, Yüksel Güran, su hermano, Enes Güran, y su tío, Salim Güran, han sido condenados a cadena perpetua agravada por la justicia turca por el asesinato intencional de Narin. Mientras que Nevzat Bahtiyar, vecino de la familia, ha sido condenado a 4 años y 6 meses de prisión por falsificación de pruebas.

A pesar de las duras sentencias, los defensores de los derechos humanos critican al tribunal por no revelar las circunstancias en las que murió la niña y cómo su cuerpo estuvo escondido durante 19 días en un pequeño pueblo donde todos se conocen.

El cuerpo sin vida de Narin Güran, una niña kurda de 8 años, fue encontrado 19 días después en una bolsa en el lecho de un arroyo a 1,5 km de su pueblo en la provincia de Diyarbakir. Narin Güran, de 8 años, desapareció el 21 de agosto después de salir de una clase de Corán en el barrio rural de Tavşantepe, en el distrito de Bağlar en Diyarbakır (Amed).

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