El Estado turco ocupante continúa cometiendo graves crímenes de guerra en una nueva ola de ataques contra el norte y el este de Siria desde la tarde del 23 de octubre de 2024.
Los ataques se dirigieron directamente contra civiles e infraestructuras civiles. Aviones de guerra, drones y artillería atacaron centros de salud y educación, panaderías, almacenes de harina y cereales, silos de trigo, centrales eléctricas, empresas y fábricas, redes telefónicas, estaciones de agua, gas y gasolina.
Según las autoridades, solo en el cantón de Cizre y el Éufrates se encuentran fuera de servicio más de 30 centros, a saber:
Dêrik: Estaciones de electricidad y gasolina de Siwêdiyê, gasolinera Girzîro, fábrica de yogur y queso Zozan, fábrica de bolsas en el pueblo de Mêrga Mîra, industrias y talleres de reparación en la ciudad
Rimêlan: Centro de construcción e industria del automóvil, Planta de aceite, Centro de llenado de oxígeno
Tirbespiyê: gasolinera Seîda, gasolinera Babasî en el pueblo de Kel Hesnak, refinería de gasolina Girê BePirê, central eléctrica
Qamishlo: centros de salud en los barrios de Xelîc y Meyselûn, centro de construcción en la carretera de Hizam, fábrica textil y almacén de trigo, empresa de desarrollo agrícola y centro de construcción en la aldea de Heremê Şêxo
Amûdê: Central eléctrica y panadería
Til Temir: Fábrica de cemento y centro agrícola de Istîqmê
Ayn Issa: almacenamiento de trigo
Kobanê: central eléctrica, panadería y silo de trigo en el pueblo de Rovî
366 aldeas se quedaron sin electricidad en Kobanê
Ayşe Nasir, co-presidenta de la Junta de Energía del cantón del Éufrates, informó que el estado turco atacó la planta eléctrica de Kobanê, dejando al centro de la ciudad y a 366 aldeas sin electricidad. Nasir afirmó que lugares estratégicos de la ciudad de Kobanê, así como pozos de agua, quedaron fuera de servicio.
Refiriéndose a los daños en la central eléctrica, Ayşe Nasir afirmó que los equipos no pudieron realizar una evaluación de los daños debido a que continuaban los ataques en la región.
Miles de millones de dólares en daños
En declaraciones a ANHA, Ziyad Rustem, co-presidente del Consejo de Energía de la Administración Autónoma Democrática de la Región del Norte y Este de Siria, declaró que 120 mil ciudadanos se quedaron sin agua y electricidad debido al bombardeo de las centrales eléctricas en Amûdê, Tirbespiyê y Kobanê.
Ziyad Rustem afirmó que los daños ocasionados hasta el momento, especialmente en los centros de servicios estratégicos, alcanzan los 5 millones de dólares y añadió que aún no han determinado todos los daños debidos a los ataques.