El Consejo Democrático Sirio (MSD) condena la masacre de Shengal, llevada a cabo por los mercenarios del DAESH el 3 de agosto de 2014. 
En una declaración escrita, el MSD exige que la justicia se haga cargo de los responsables de la masacre.

Subraya que el pueblo yazidí que vivía en Shengal fue expuesto a una de las masacres más bárbaras de la historia de la humanidad, el MSD añade: "Esta masacre pretendía destruir la identidad, la cultura y las creencias relligiosas y cambiar la demografía de la región. Condenamos esta terrible masacre y al mismo tiempo queremos homenajear a las fuerzas de las HPG, las YPG y las YPJ, que desempeñaron un papel importante en la resistencia de Shengal y lograron salvar al pueblo del terrorismo".

Recordando la masacre del ISIS en la ciudad de Suwayda, en el sur de Siria, el MSD añade: "Los mercenarios del DAESH continúan ejerciendo la violencia en el nombre del Islam, que por el contrario llama a todas las creencias a vivir juntas de manera fraternal. Los lugares sagrados de los yazidíes han sido destruidos. Para oponerse al radicalismo y a la mentalidad anti humanitaria, y para evitar estas masacres, la comunidad internacional debe pedir cuentas a los autores y partidarios de estas masacres".